Nuestro cuerpo dice mucho de nosotros, todo el tiempo. Y la postura que adoptamos al dormir tiene algo que contar sobre nuestra personalidad.
Sí: aunque te parezca descabellado, estudios científicos han demostrado que la forma en que dormimos en la cama tiene mucho que ver con quiénes somos. El tema se relaciona con el lenguaje corporal y cómo este se expresa mientras estamos dormidos, ya que, durante el sueño, experimentamos el momento de mayor vulnerabilidad del día.
Solemos tener una posición favorita porque la forma en que solemos descansar nos protege, nos relaja. Por eso cada uno duerme de una manera particular
Aunque cueste creerlo, la posición que elegimos a la hora de reparar el cuerpo del ajetreo cotidiano está relacionada con la manera en que expresamos nuestros sentimientos, las emociones que expresamos y las que guardamos, las represiones personales y otras cuestiones.
1. De costado con las rodillas flexionadas
Si dormís acostado de lado, con las rodillas flexionadas, sos una persona tranquila y confiable a la que es difícil ofender. Solés ser optimista y podés adaptarte a casi todos los cambios que te ocurren porque no le temes a lo que vendrá.
2. Boca abajo
Si sos de los que duermen boca abajo con los brazos y las piernas a los lados, sos una persona impulsiva, que toma la iniciativa. Sos ordenado, organizado, y preferís evitar las sorpresas. Tus habilidades de liderazgo son notables.
3. Boca arriba
Si dormís boca arriba, lo más probable es que seas una persona positiva y alegre. En general, expresás abiertamente tu amor por la vida. Sos sincero, te gusta la buena compañía, y tenés una fuerte personalidad.
4. En posición fetal
Las personas que eligen dormir en posición fetal sienten la necesidad de ser protegido y comprendido por los demás. Por eso se acurrucan para intentar separarse de los problemas del mundo que te rodea. Según los expertos en lenguaje corporal, piensan en las cosas en exceso y se preocupan sin necesidad.
5. El soldado o "tronco"
Si dormís como un soldado, acostado boca arriba y con los brazos pegados al cuerpo, probablemente seas una persona que sabe cuáles son sus metas en la vida y va por ellas. Solés ser equilibrado, aunque también un poco estricto y exigente. Los expertos dicen que suelen ser personas rígidas y muy testarudas: la tensión de estas personas es alta y se refleja en esta posición inflexible.
