Miriam Reyes es una joven española que apenas había acabado la carrera de arquitectura cuando a José, un primo suyo de apenas 3 años, le diagnosticaron autismo. A partir de entonces, la familia no se detuvo en su empeño de ayudar al pequeño y empezaron a trabajar con distintos médicos que entienden en la materia.
Como los especialistas les explicaron que estos niños son “aprendices visuales”, es decir, que su forma de aprendizaje es visual, la familia comenzó a usar herramientas gráficas para interactuar con el pequeño José. Miriam cuenta que cuando acompañaba a su primo a un parque era difícil conseguir que le hiciera caso, salvo que lograra hacerse entender mediante algún dibujo.
Allí comenzó a investigar y al no encontrar nada en Internet que pudiera ayudarla, entonces Miriam decidió crearlo ella misma. Y de este modo surgió Aprendicesvisuales.org
Aprendices Visuales es una organización sin ánimo de lucro cuya misión es que los niños con autismo tengan a su alcance las herramientas que le permitan el máximo desarrollo de su potencial, a través de las siguientes líneas de actuación: investigación, material visual y sensibilización social.
“Hace ahora unos años, compartí en un blog un cuento, “El calzoncillo de José” que habíamos realizado para un familiar con autismo.” cuenta la joven andaluza Miriam Reyes Oliva. “No podía imaginarme, todo lo que aquella pequeña acción iba a suponer en mi vida. Me han escrito familias de todos los rincones del mundo, contándome que han utilizado el cuento, y agradeciéndome que lo hubiera compartido, ya que no encontraban mucho material de trabajo adaptado a pictogramas para poder trabajar con sus hijos.
Y continúa ella contando “Casi sin darme cuenta, había atravesado esa primera puerta que daría respuesta a mis inquietudes sociales, ya que, contribuir a que todos estos niños con mentes maravillosas puedan desarrollar su potencial, es para mi algo indescriptible.Tras el descubrimiento de la demanda existente, decidí poner todo mi tiempo y creatividad a disposición de estos niños, y diseñé el proyecto Cuentos para Aprendices Visuales” cuenta la joven andaluza Miriam Reyes Oliva.
Y lo que entonces fue una forma de ayudar a aquel pequeño, hoy se ha convertido en una organización dedicada a la formación online para niños con autismo con más de 50.000 descargas y 300.000 visualizaciones que recibió el Premio Desafío Mazda 2015.
En el sitio web del emprendimiento, los realizadores explican que: “Utilizamos el arte como herramienta de sensibilización social. Organizamos exposiciones en las que comparten espacio artistas con y sin autismo. Unas muestras donde prima el talento y que siempre sorprenden a los visitantes. El objetivo, concienciar a los visitantes sobre una casuística muchas veces invisible a los ojos, el autismo.”
Miriam nos cuenta que Actualmente, están desarrollando los cuentos de las dos colecciones, una enfocada al aprendizaje y otra al entretenimiento. Todos los cuentos se publican en la web de Aprendices Visuales, desde donde no descargarlos, compartirlos y utilizarlos.
Explica Miriam que “Nuestro objetivo es llegar a todos los niños que quieran disfrutarlo, así que puedes comenzar hoy descargando y enviándolo a todos tus conocidos: https://aprendicesvisuales.com/p/cuentos_aprendicesvisuales”
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