Lisboa, capital de Portugal, te atrapará desde el primer instante

La manera más agradable de conocer Lisboa es caminar. El centro de Lisboa es un fantástico lugar para recorrer a pie.

que hacer en lisboa
Lisboa
Actualizado: 25 de mayo de 2021

Lisboa, una capital que engancha, que ni bien llegás te atrapa con su música, sus tranvías, sus paseos cerca del rio, y su deliciosa oferta gastronómica. Es lo suficientemente pequeña como para no sentirse desbordado por su tamaño, pero a la vez lo suficientemente grande como para no sentirse aislado, o para tener la misma vida y servicios que cualquier otra capital europea.

lisboa

La manera más agradable de conocer Lisboa es caminar. El centro de Lisboa es un fantástico lugar para recorrer a pie.

Las distancias son cortas y podrás empaparte de la belleza de las decenas de rincones con encanto de Lisboa

La Baixa, el corazón del centro histórico de Lisboa, es el punto de partida para conocer la ciudad. Recorré sus calles y su pintoresco elevador de Santa Justa, antes de conocer la ventana que Lisboa abre al río Tajo en la espectacular Plaza del Comercio.

Lisboa

De ahí, un paseo por las colinas que rodean ese centro histórico para visitar el aristrocrático Chiado, el Castillo de San Jorge o el barrio de Alfama, claves para ver en Lisboa.

Mirador San Pedro de Alcántara

Si hay más tiempo podrás explorar la arquitectura manuelina del barrio de Belém y la cara más moderna de Lisboa en el centro económico de la ciudad y el Parque de las Naciones.

lisboa

Su temperatura es envidiable durante todo el año, su marcha nocturna y su ambiente de ocio es de los mejores de Europa, hay playas de muy buena calidad a pocos kilómetros del centro de Lisboa y, en lo que se refiere a monumentos, la ciudad de Lisboa es simplemente impresionante.

lisboa

Lisboa

Un breve recorrido un poco más detallado para que te organices:

Centro de Lisboa histórico y moderno

El concepto de centro de Lisboa ha variado mucho en las últimas décadas. El tradicional centro histórico de Lisboa a orillas del río Tajo -la muy visitada Baixa Pombalina– es un destino turístico y comercial, mientras otras zonas situadas algunos kilómetros más al norte, han ido ganando importancia como centro económico de la Lisboa moderna.

Quienes viven en Lisboa plantean que un poco más al norte de la Baixa, existe una Lisboa moderna, una capital europea encantadora, donde es un placer vivir.

Baixa Pombalina

El centro histórico de Lisboa se articula en torno a la Baixa, conocida también como Baixa Pombalina (ya que fue el Marqués de Pombal quien se ocupó de su reconstrucción tras el maremoto que la asoló en el siglo XVIII). Esta es la zona más representativa del centro de Lisboa.

La Baixa comienza en el norte en las Plazas del Rossio y Restauradores, y es una zona extrañamente llana entre colinas. Sus calles son rectas en forma de cuadrícula. Una parte de ellas permite el tráfico, mientras que otras- entre ellas la principal Rua Augusta- son enteramente peatonales y presentan los suelos de pequeños adoquines blancos y negros típicos de las ciudades de Portugal.

La Baixa: zona llana entre colinas

La Baixa es hoy una zona comercial y de hostelería. Allí podemos encontrar pequeños comercios -sobre todo de textil y algunos dedicados al turismo- restaurantes y bares, bancos, grandes cadenas de moda y tiendas con recuerdos turísticos.

La Baixa suele estar casi siempre en temporada alta asolada de turistas disfrutando de su bella arquitectura.

La Rua Augusta

Es la calle principal de la Baixa. Empieza en el Rossio y concluye en el Arco Triunfal que da acceso a la Plaza del Comercio y al río Tajo.

El Rossio es uno de los principales puntos de encuentro de Lisboa y una de las plazas más populares de la ciudad.

Desde allí -hay estación de metro de la línea verde- se puede llegar fácilmente a la Baixa, al Chiado y al Barrio Alto, a la colina donde está situado el Castelo de Sao Jorge y a la popular calle de Portas de Santo Antao, con sus restaurantes y terrazas turísticas.

No dejes de visitar la Casa do Alentejo, un palacete moro del siglo XVII donde se nota la influencia de la cultura árabe.

lisboa

Destellos de Marruecos en el zaguán, con sus mosaicos en el piso, y los arcos de herradura ornamentados con pequeños detalles sostienen la arquitectura del sitio.

lisboa

Como cuenta con restaurante y bar en su interior, la recomendación para aquellos sin mucho presupuesto, es ignorar el restaurante e ir a por unas cañitas al bar y conocer el lugar que es impresionante.

lisboa

Para conocer la Baixa, lo mejor que podemos hacer es pasear por sus calles sin prisa, ya sea por nuestra cuenta o con un tour guiado a pie por el centro de Lisboa.

Elevador de Santa Justa

En la Baixa podrás contemplar el Elevador de Santa Justa, situado al oeste del barrio, que da acceso al Chiado y al Barrio Alto.

lisboa

Es un ascensor de hierro forjado que ha perdido parte de su antiguo papel para comunicar dos barrios del centro de Lisboa, pero que hoy se ha convertido en una de las atracciones turísticas más populares de la zona.

lisboa

Las vistas del centro desde su plataforma más alta son muy recomendables.

La Plaza del Comercio

La Plaza del Comercio es una de las grandes estampas del centro de Lisboa para el turista que la visita. Es una preciosa explanada abierta al río Tajo que alberga en los edificios de fachadas amarillas que la rodean, las sedes de varios ministerios y que es también el punto de reunión típico de los lisboetas para celebraciones y concentraciones públicas como las del fin de año.

Si nos encontramos en la Plaza del Comercio y miramos en dirección a la Rua Augusta, a la izquierda tendremos la colina donde están el Chiado y el Barrio Alto, y a la derecha, otra colina donde se ubican la Catedral y el Castillo de San Jorge, en el barrio de Alfama.

lisboa

El tranvía 28, el más popular de los que recorren la ciudad de Lisboa, comunica ambas zonas. Va casi siempre abarrotado de turistas y, también, de algún carterista que otro.

lisboa

Alfama, la Catedral y el Castillo

Si seguimos hacia el este la calle por la que discurre la línea del tranvía -que en la zona de la Baixa es la Rua Conceiçao– llegaremos en unos cinco minutos a la Sé, la Catedral románica de Lisboa, y en unos quince estaremos en la parte más alta de la colina, para visitar el Castillo de San Jorge, con extraordinarias vistas de Lisboa desde lo alto.

Entre el Castillo y el río está el barrio de Alfama, denominado cuna del fado de Lisboa, con callejuelas pequeñas y retorcidas y casas típicas por las que es un placer perderse y callejear.

Chiado y Barrio Alto

Si volvemos a la Baixa y nos dirigimos a la colina del oeste -ya sea en tranvía, a pie o tomando las escaleras mecánicas del metro que nos ahorran la cuesta- llegaremos a las zonas del Chiado y el Barrio Alto.

El Chiado ha sido una de las zonas más elegantes y aristocráticas de la ciudad de Lisboa. Con el paso de los años, la clase alta de la ciudad lo ha ido abandonando como lugar de residencia, pero sigue conservando aquel ambiente de cafés y librerías que lo relaciona desde siempre con la intelectualidad de Lisboa.

lisboa

En la Plaza de Luis de Camoes, se encuentra una estatua del poeta Fernando Pessoa junto al café A Brasileira, probablemente el más típico y conocido de la ciudad.

lisboa

Por la noche, la zona vecina al Chiado se transforma y se llena de jóvenes que disfrutan del comienzo de la vida nocturna de la ciudad en el Barrio Alto, una zona de calles estrechas, abarrotada de pequeños bares y restaurantes, que es uno de los lugares más típicos para las primeras horas de la noche de los jóvenes lisboetas, que compran la bebida en los pequeños bares y la toman tranquilamente en la calle con sus amigos.

Belém

Fuera ya de lo que es el centro histórico, hay otras zonas muy interesantes que visitar en Lisboa. Belém es la más turística de ellas. Está situada junto al río Tajo, a pocos kilómetros ya de su desembocadura, en el extremo oeste de Lisboa. En ella se encuentran, a una distancia de pocos metros entre sí, tres de los monumentos de Lisboa más populares: La Torre de Belém, el Monasterio de los Jerónimos y el Monumento a los Descubridores.

lisboa

Monasterio de los Jerónimos

lisboa

Torre de Belém

Lisboa

Monumento a los Descubridores

Cerca del moderno Centro Cultural de Belém encontrarás la popular fábrica de los Pasteles de Belém, una referencia de la repostería portuguesa y uno de los recuerdos más típicos que podemos llevarnos de la ciudad.

Tuk tuk

En este lugar donde el fado convive con la electrónica más moderna, verás pasar un vehículo con reminiscencias vietnamitas, camboyanas o indonesias.

Hablamos del tuk-tuk, convertido en el medio de transporte turístico por excelencia en cuanto llega el buen tiempo, de abril a octubre.

Los choferes cobran por hora y el precio de 70 euros, caro para los países del sur, incluye la explicación de los lugares que se visitan.

Leé también:

ETIQUETAS:  
magnifiermenu linkedin facebook pinterest youtube rss twitter instagram facebook-blank rss-blank linkedin-blank pinterest youtube twitter instagram