Horóscopo 2017: Jimena La Torre anticipa predicciones para el año que viene

Compartimos un adelanto el nuevo libro de la astróloga y tarotista, editado por Grijalbo.

“Un mundo sin cuerda es un caos”, de la película “Un ratoncito duro de cazar”. En la trama, dos hermanos tienen que ponese de acuerdo y finalmente mezclan lo que los dos querían: una fábrica de cuerdas (herencia del padre) convertida en una fábrica de quesos. Honraron al padre y se unieron en la tarea.

Cuando mencionan “sin cuerda” se refieren a cordura, a pesar de que la fábrica del padre era de cuerdas: esa es la simbología de la frase. Dos hermanos completamente antagónicos y un espíritu, el del padre, representan la trinidad. Y si bien para Libra parecería que todo está decidido de un lado o del otro, no es así. Está apoyado en el eje que sostiene los platillos, o sea un padre: un eje y dos balancines de cada lado.

 

Bienvenidos al Año de Libra

Se trata de un año en el que necesitarán un eje para apoyarse, representado por Júpiter desde Libra. Tenemos en un lado de la balanza a Urano —el caos—, y por el otro, a Plutón —el infierno—, formando una T que durará prácticamente todo el año. Pedí, por favor, equilibrio para que se puedan mantener balanceadas las energías del universo.

Un movimiento en falso puede hacerte caer, todo debe estar en su justa medida. En principio, cada uno con su propia paz interior y manteniéndose en eje, y luego así también en el mundo.

predicciones2017grijalbo

Este 2017 Júpiter estará en Libra cuando comience el año calendario. La presencia de este planeta comenzó en septiembre de 2016 y se extenderá hasta el 10 de octubre de 2017, día en el que entrará al signo de Escorpio.

Llevado a una cuestión anual predictiva, obviamente la benevolencia exalta y favorece en especial a la trilogía de aire, a los tres signos inteligentes. Pero, como siempre digo, “a mayor inteligencia, mayor duda”, o “pienso, luego existo”, de René Descartes. Recuerden siempre estas frases.

Hay algo muy interesante en la constelación de Libra. Al principio no se tenía en cuenta como una constelación independiente, era parte de Escorpio y parte de Virgo. Libra, la balanza, no tiene estrellas de gran magnitud y está situada entre Virgo, al oeste, y Escorpio, al este. Fue en algún momento parte de las pinzas del escorpión: Zubenelgenubi (α Librae), que significa “pinza del sur”, y Zubeneschamali (β Librae), “pinza del norte”.

Visualmente son los travesaños de equilibrio de la balanza. Por otra parte, del lado de Virgo, nos situamos en Astrea, hija de Zeus y Temis, que personifica junto a su madre a la justicia. Ella era una titánide, la última inmortal que vivió entre los humanos durante la Edad de Oro de Crono (Saturno para los romanos). Abandonó la tierra cuando ésta, en la Edad del Bronce, gobernada por Zeus, se convirtió en un mundo malvado. Así fue como su padre la subió al cielo, situándola entre las estrellas como constelación Virgo, y la balanza de la justicia se convirtió en la cercana constelación Libra.

La realidad es que esta parte de Virgo y Libra sucedió para que finalmente se formara una constelación diferente, lo que hoy conocemos como el signo de la justicia.

Calculo que por una cuestión perfecta y matemática determinaron el duodécimo signo como Libra, y porque además coincidía con el cumpleaños de Octavio César, que impartió la justicia en Roma y justo dividía la porción en seis y seis. Por donde se lo mire, Libra venía a ordenar, a dividir y a lograr paz.

Será un año de mayor reconocimiento a los signos de aire y agua, debido a que Júpiter entra en Escorpio y los signos de agua aportarán la emocionalidad necesaria para descubrir su verdadero sentir y así llegar al fondo del ser para renacer cual Ave Fénix.
Busquemos justicia interior y armonía, que no pasa sólo por meditar y respirar, sino también por ser amables. Pasa por tener en cuenta al otro; sobre todo, por informarte bien, escuchar todo antes de decidir, y si no, dejar que el universo se encargue.

 

Los planetas en 2017

Destaco a Saturno y Júpiter, que si bien no están en lo que se llama disposición mutua, están en signos invertidos. Ambos en los mismos grados haciendo un sextil, o sea, una estrella. ¡Qué maravilla una estrella entre Júpiter y Saturno! En esta mezcla de opuestos, Sagitario, el signo que rige Júpiter, tiene a Saturno que lo limita. Y Júpiter en Libra que ordena y equilibra. En ambos casos hay una rectitud.

El lema del año es todo en su justa medida, todo medido. En este Año de Libra aprendan a sentirse librianos: el ego aparece muy poco, y los grandes maestros Júpiter y Saturno nos enseñan a ser justamente optimistas.

El año empieza con el Sol en Capricornio en 10°, un lindo grado. La rueda de la fortuna ayuda a dejar girar la suerte en este 2017, que en verdad necesitaremos.

La Luna en Acuario de 11° a 18° comienza en el número del ar¬cano La Justicia en el tarot universal, para que se ordene sabiamente.

Mercurio comienza en grado 3° de Capricornio. La magia del tres veces tres, que ayuda a comunicar y en los estudios de los signos de tierra, que lograrán terminar todo lo pendiente del año anterior.

Venus en 27° enseguida entrará a Piscis asegurando un mes de amor para los signos de agua, en el que unas vacaciones cerca del mar junto al amor son lo indicado.

Marte comienza en 9° de Piscis. Este Marte da poca voluntad. Es ideal para irse de retiro espiritual o dar clases de espiritualidad, en especial para los signos de agua y para Piscis.
Júpiter arranca en un grado maravilloso: 21° de Libra, el grado del mundo. El grado en el que los ideales se ubican en la realidad de saber tener lo que queremos y así desear lo verdadero. Se quedará en el signo de Libra hasta el 10 de octubre.

Saturno, también en 21°, en el signo de Sagitario colaborará en el orden de los ideales. No delirará en saber con qué cuenta, simplemente no dará puntada sin hilo. A finales del año entra en Capricornio.

Urano este año transita el último decanato de Aries desde 20°, el grado del Juicio Final, que ayudará a aceptar los cambios a los carneros. No será tan grave, porque son más tranquilos que los del primero y el segundo decanato. Recordá: si algo no puede ser desamarrado, ¡cortalo!

Neptuno comienza en 9° en conjunción con Marte en Piscis. Muestra a los piscianos como sabios, ermitaños, sin querer estar con cualquiera sino sólo con quienes en verdad tiene ganas de amar. Los del segundo decanato trabajarán el volver a enamorarse rescatando la verdadera estrella que tienen en su interior.

Plutón seguirá en Capricornio desde el 16°; los del 2° decanato sentirán esta energía transformadora, una gran presión hasta encontrarse con el suelo y más profundo también. Vivirán situaciones de finales y principios que venían intuyendo.