La sencillez de un ídolo: el Messi solidario que no conocemos

Sin promocionar y en silencio, el crack tiene actitudes solidarias que se desconocen

Hay una parte de la vida de Messi de la que los medios no hablan, que si la promocionara,  ocuparía titulares en todos los medios del planeta. Pero es que él prefiere hacerlo en silencio, sin las estridencias de quien realiza los gestos para irrumpir en las portadas.

Hoy se conoció la tarjeta de invitación al casamiento que habla por sí sola de alguien diferente: no hay listas de regalos. En la tarjeta de invitación Leo pidió una donación para TECHO, que no es su fundación, sino una organización social presente en más de 100 asentamientos de la Argentina, que ayuda a más de 3 millones de personas en situación de pobreza, ayudándoles a construir sus viviendas.

“Para transformar nuestra alegría en un acto de solidaridad, en lugar de un obsequio, te pedimos una donación a TECHO”

Así dice la invitación y se invita a leer al dorso para conocer los pasos a seguir. Ahí ya se indica que la donación se puede realizar en efectivo o con un cheque a nombre de dicha organización social.

Con diferentes anécdotas, fuentes del mundo del fútbol coinciden y dicen:

“Es un líder positivo. Hace las cosas callado. No te enterás de nada porque no lo hace con esa intención”

Cuando salió en todos los medios que había sacado de su bolsillo el dinero para cubrir los salarios de algunos auxiliares de la Selección, frente el incumplimiento de la anterior gestión, lo que se escuchó decir fue: “es posible por su forma de ser”.

Varios testigos del predio de la AFA, que piden no exponer sus nombres porque saben que Messi no quiere divulgar sus obras, coinciden en que:

“Él no quiere pero esta faceta debe saberse. Messi en el predio es Dios, más que adentro de la cancha”

Desde sorteos de bienes materiales entre empleados, hasta muestras de afectos con los más pequeños, la lista se extiende en Ezeiza. Heladeras, cocinas y lavarropas son algunos de los instrumentos que ha donado para los empleados del predio, que no ocultan su admiración por los silenciosos gestos de él.

Hubo un sorteo con más de cuatro motos como premio: Leo, vergonzoso, ni siquiera quiso asistir a la rifa. Así se mueve hasta en la intimidad.

El coordinador médico Donato Villani, que lo conoce desde su inicio en la Selección, dice:

“Sigue siendo el mismo pibito que debutó en Primera. Es un pibe cualquiera”

Las puertas del predio se abren en reiteradas ocasiones y siempre en silencio. Todo está aceitado para que no se difunda, pero por allí pasan cientos de chicos con graves enfermedades que tienen como único sueño compartir unos minutos con él.

Messi los recibe, se saca fotos y les firma autógrafos. Dispone un rato de su tiempo para brindar felicidad. Lejos de los flashes

Messi es embajador de Unicef desde 2004 y colabora activamente. Cuando llega a la Argentina, lleva a cabo compras de diferentes insumos para hospitales que nunca tienen siquiera un flash de la prensa, porque decide ocultarlo.

No hace falta una cámara para una obra de bien

 

Otras personas cercanas, no hablan sólo de sus donaciones, hacen hincapié en el hombre que predica con el ejemplo. En las concentraciones, siempre muestra su costado más profesional: temprano se recluye en su habitación para descansar, mientras la mayoría se queda hasta más tarde jugando a la Play o un Ludo Matic grupal en la tablet, juego que es  furor de las concentraciones.

“Es un líder positivo, que da el ejemplo”

Cuentan por ejemplo los empleados de un hotel de San Juan, que dejaron diferentes camisetas sobre una mesa para que los jugadores las firmaran a medida que se retiraban. Apenas dos o tres tuvieron la gentileza de estampar su recuerdo. Lio, el último en irse, tomó una por una las más de 20 camisetas y puso el gancho.

Rosario es sin duda su “lugar en el mundo”, y es ahí donde su fundación refaccionó el espacio deportivo municipal Parque del Mercado y el Polideportivo Deliot, en la zona sur donde hoy se casa.

Y silenciosamente, también organizó la primera carrera solidaria por un “deporte sin violencia”, la jornada de intercambio médico entre pediatras de los hospitales Vilela y Garrahan, la donación de un aparato de última generación para tratar enfermedades gastrointestinales para el hospital Centenario, la remodelación del Cotolengo Don Orione, y la refacción de la Escuela 66 General Las Heras.

La Fundación nació hace 10 años, después de que Leo visitara un hospital de niños con cáncer en Barcelona, en febrero de 2007

La Fundación se sustenta en 3 pilares: salud, educación y deporte. Además de en Argentina y en España, ya actuaron en Indonesia, Myanmar, Argelia, Túnez, Siria, Jordania, Nepal, Haití, Sierra Leona, Mozambique y Senegal.

Allí combatieron enfermedades (malaria, chagas, cáncer) y la desnutrición, construyeron hospitales, escuelas y predios deportivos, asistieron a refugiados y víctimas de catástrofes humanitarias.

Sin duda Messi es el capitán de las grandes y pequeñas cosas

¡Felicidades Pulga!