“Trabajar es tan feo que hasta te pagan por hacerlo”. Este dicho ya popular suele volverse más dramático en épocas de crisis, cuando la cantidad de oportunidades laborales escasea y uno piensa en hacer cosas que nunca antes había considerado para acceder finalmente a una remuneración apropiada.
Por otro lado también, las siempre cambiantes modas hacen que surjan nuevas necesidades y con ellas nuevas profesiones y nuevas oportunidades laborales. En estos casos, algunos priorizan aspectos como su vocación o unos horarios flexibles por encima del sueldo que permitan trabajar y además disfrutar de los beneficio que otorga el dinero.
Lo cierto es que para casi todo el mundo lo importante es que trabajando mucho o poco, puedan contar con una buena cantidad de dinero cuando llega el día de cobrar el salario.
Sabemos que hay profesiones mejor remuneradas que otras. Médicos, jueces, notarios, controladores aéreos, futbolistas… son algunas de ellas, pero hoy nos ocuparemos de aquellas alternativas que muy poca gente considera y que el blog de Forbes ha enumerado recientemente.
Aquellos a quienes les guste ir de compras tienen una tarea a su medida. Los “personal shopper” o “asistentes personales de compras” están en boga desde hace algún tiempo. Quien pueda permitirse contratar a alguien para que le aconseje en sus adquisiciones tiene que ser una persona con recursos; por eso un buen profesional en este ámbito cobra entre 20.000 y 80.000 euros al año en determinados lugares. Es fundamental ser amplio de criterios a la hora de asesorar a otro en sus compras, ya sean de ropa o de objetos de decoración, puesto que el “personal shopper” debe entender que no está comprando para él sino que otra persona con gustos y opiniones que pueden ser muy diferentes a las suyas.
De todos modos, sabemos que trabajar para gente con alto poder adquisitivo puede resultar muy lucrativo. Quienes se dedican a guiar actividades de ocio y entretenimiento en cruceros de lujo pueden tener sueldos próximos a los 4.000 euros al mes, con alojamiento y manutención incluidos.
Hay otra profesiones que requieren un poco más de paciencia y autocontrol. Por ejemplo, en algunas ciudades de Estados Unidos se pagan hasta 100 dólares por hora por ser maniquín humano y lucir la ropa de moda en las vidrieras de las casas de venta de ropa. Este trabajo requiere un plus ya que se deben tener unas medidas similares a las de los modelos de pasarela.
Otros empleos están bien pagados sencillamente porque son pocos los candidatos dispuestos a aceptarlos. Es el caso de los embalsamadores. Aquellos que se destacan en sus tareas llegan a cobrar unos 38.000 euros anuales.
Claro que factores como el riesgo que se asume o la atención y el cuidado que uno debe prestar al trabajar son elementos que terminan generando buenos ingresos. Por ejemplo, es muy buena la remuneración de los limpiadores de escenas de crimen de la policía de ciertos países, ya que generalmente trabajan en circunstancias que serían insoportables para la inmensa mayoría.
Por lo mismo un buceador que se hunda en el océano en busca de perlas puede recibir hasta 1.000 euros diarios. Algo parecido es lo que reciben los dobles de riesgo que aparecen en escenas peligrosas en películas. Para los perforadores en plataformas petrolíferas las dificultades comienzan con la maquinaria utilizada. Eso sí: obtienen alrededor de 45.000 euros anuales por lo que hacen.
Pero por supuesto hay otros que son menos riesgosos y producen satisfacciones instantáneas como el caso de los testeadores de nuevos sabores de helados, quienes llegan a ganar hasta 56.000 dolares al año.
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