Se convirtió en un éxito la venta de aire puro envasado

AETHER es un proyecto que ofrece aire limpio, fresco y puro envasado en una botella. El proceso consiste en viajar a algunas de las zonas más bellas y vírgenes de la campiña inglesa, lejos de las contaminantes industriales, autopistas, y las impurezas urbanas, en busca de la calidad más inmaculada de aire.

Su creador, Leo De Watts, un inglés de 27 años, se está haciendo rico con este negocio tan particular: vender frascos llenos de aire.

Según cuenta en su sitio, el término AETHER viene de la antigua palabra griega para designar el aire puro y fresco (éter). Según la leyenda, éter era sólo accesible a los dioses, que inhalaban una alternativa más sana y superior a la del aire disponible para los humanos mortales. Tierra, Fuego, Agua, Aire y Éter constituyen los cinco elementos, donde el éter es una esencia pura, que sólo se encuentran en el más claro de los cielos.

Según este joven británico, en origen la idea era acercar aire limpio a los habitantes de ciudades donde el aire está altamente contaminado y entonces puedan tomar una bocanada de aire limpio. El precio del frasco de “aire puro envasado” arranca en un piso de 88 libras, algo así como 116 dólares.

La particular visión comercial de De Watts no concluye aquí, ya que aprovechando el nuevo año chino, han lanzado un “especial de año nuevo” cuyo valor alcanza los 1.287 dólares (888 libras).

Esto también tiene que ver con que China es el país donde el producto ha tenido mayor éxito, principalmente en las ciudades de Beijing y Shanghai. Claro que se trata de uno de los países con mayor emisión de dióxido de carbono del mundo.

Cada frasco de AETHAER está etiquetado, indicando el área de la cual se recogió el AETHAER, y una descripción de los contenidos se proporciona en el reverso del envase. Su compra será acompañado de una etiqueta de autenticidad, que se fija a la tapa del frasco, asegurando que su paquete contiene auténtico AETHAER, puro y claro.