Limpiar y ordenar nuestra casa es un trabajo arduo tanto físico como psíquico. No se trata solo de obtener pulcritud en nuestro hogar, también nos encontramos con objetos en desuso, arrumbados y a la espera de que decidamos por ellos, si quedan en casa o ya cumplieron su ciclo. Qué pasa cuando ese objeto tiene una carga emocional, algo que nos recuerda a alguien querido o a algún momento en particular de nuestra vida. Te pasamos algunos tips para aprender cómo dejar ir los objetos con valor sentimental.
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Ordenar la casa, además de limpiarla, es, de alguna manera, algo muy parecido a ordenar la vida: si no soltamos lo viejo no podemos dejarle lugar a lo nuevo. Decir esto parece bastante simple, sobre todo si hablamos del guardarropa o de los cajones de la cocina. Pero cuando se trata de dejar ir objetos de valor sentimental, la cosa parece más difícil.
Más que nunca estos meses, a raíz de la cuarentena por el Covid-19, se acrecentó esta actividad en casa, limpiar y ordenar y volver a limpiar sobre lo limpio, así como un sin número de pasatiempos para hacer más llevadero el encierro en casa.
Seguro ya ordenaste, regalaste ropa en buen estado que no te entra o no usas más, tiraste elementos de cocina ya muy usados, y hasta quizás rotos que no sabes por qué seguían en los cajones de la mesada. También cocinaste hasta las recetas más rebuscadas y originales, hiciste ejercicio, pintaste, bailaste, hiciste muchos zoom y videollamadas.
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Pero seguramente te enfrentaste con objetos sin uso y recuerdos guardados en cajones, placares, alacenas que seguro ni sabías que tenías. Pero… ¿Pudiste tomar la decisión de tirarlos? Te contamos algunos consejos para ayudarte a tomar la decisión y de esta forma hacer espacio en tu hogar y en tu vida para que ingresen cosas nuevas.
Al dejar ir estos objetos puedes hacer espacio para cosas nuevas y aquellos pocos objetos con valor sentimental que decidas conservar van a tener en tu vida un mejor lugar donde los puedas apreciar y siempre tenerlos presente en lugar de arrumbados y olvidados.
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Dejar ir objetos es, de alguna manera, soltar parte del pasado.
Por mucho valor sentimental que tengan algunos objetos, no tiene demasiado sentido acumular cosas rotas, ya que no generan satisfacción al mirarlas y tampoco pueden cumplir su función. En lugar de darnos placer nos angustia verlos así. Este es el primer motivo que tienes que evaluar al tomar la decisión y deshacerte del objeto.
Las fotos viejas que están impresas en papel suelen ocupar mucho espacio, pero parece una locura el solo hecho de pensar en eliminarlas. Sin embargo, puedes con paciencia revisar tus cajas de álbumes con fotos viejas, y seguro vas a descubrir una enorme cantidad de fotos que puedes dejar ir. Los motivos: están fuera de foco, hay gente retratada que ya no está en tu vida, las que están rotas o húmedas.
Las personas y recuerdos importantes para vos siempre permanecerán en tu corazón
Una vez que tiraste las seleccionadas, organiza las que quedaron en álbumes y lo mejor es clasificarlos, nombrarlos, ponerles el año, el lugar, etc. Y buscarles una linda caja y ponerlos en un lugar visible para que puedas encontrarlas fácilmente cuando quieras mostrárselas a alguien o simplemente recordar momentos de la vida.
Si te animas, ahora que la pandemia te tiene en casa, digitalízalas para tenerlas siempre a mano, aun cuando no estés en casa.
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Con los dibujos, cartas y otros papeles nos va a pasar lo mismo que con las fotos. Todos nos van a remitir a algún recuerdo o quizás a un momento importante de nuestra vida. Pero al revisarlos con el objetivo de hacer lugar, seguro vas a reunir una buena cantidad de papeles que nos son totalmente necesarios.
No todos los necesitas, no todos te dan felicidad
De igual modo que con las fotos lo que quede en casa, organízalo. Con los dibujos de los pequeños de la familia puedes armar cuadros, carpetas, álbumes, etc.
La regla básica para tirar objetos que contienen valor sentimental, es dejar de acumular y arrumbar. Realmente no sirve tener objetos apilados a los que ni siquiera puedes llegar. Por tal motivo es muy importante que a todo lo que quieras conservar, búscale un lugar.
Lo mejor de conservar objetos con valor sentimental es poder verlos cotidianamente, disfrutarlos y que te den felicidad. ¡Ánimo y manos a la obra!
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