Las parrillas de inducción son una herramienta de cocina moderna que funciona como las hornallas de gas pero de manera más segura y rápida. Simplifican algunas tareas y acelera el proceso de cocción en alimentos con sartenes y ollas.
Estas parrillas funcionan a través de un campo magnético con bobinas que entran en calor una vez que estén en contacto con un recipiente. Esto logra evitar accidentes al quemarse cerca de la parrilla, en especial si hay niños en la cocina.
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Además, logra calentar las herramientas de cocina mucho más rápido que las hornallas de gas convencionales. Esto nos hará ahorrar más en el uso de gas y también nos ahorrará tiempo al momento de preparar cada comida. Esto es ideal para las casas con familias numerosas o personas trabajadoras y con poco tiempo para prepararse una comida.
El hecho de que la superficie sólo se caliente al entrar en contacto con el recipiente, supone una tranquilidad extra para los hogares con niños pequeños y con mascotas susceptibles de trepar a la cocina.
Es necesario conocer qué tipo de utensilios se pueden colocar encima de estas parrillas, para asegurarse de que la transmisión de calor sea la correcta y no se dañen. Los sartenes de hierro ayudan al campo magnético a trabajar, entonces deben ser de hierro fundido, acero inoxidable o tienen que tener alguno de estos materiales en la base.
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También hay diferentes moldes que fueron diseñados específicamente para ser utilizados en este tipo de parrillas. Se debe tener en cuenta que el tamaño del sartén u olla no sobresalga de la placa, para que toda su base logre calentarse bien.
Uno de los utensilios que no se debe emplear al momento de usar estas parrillas son las cucharas de metal. Ya sea para revolver alguna mezcla en una olla o para degustar alguna preparación mientras se calientan, estas cucharas deben mantenerse alejadas de las parrillas de inducción. Esto se debe a que la cuchara puede permitir que la corriente caliente fluya a través del cuerpo y nos termine dañando.
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Las parrillas de inducción logran reemplazar muchos de los imprevistos que una parrilla a gas puede tener, desde la rapidez como de la seguridad al momento de manipularla. Pero también cuenta como otros aspectos positivos que las hace ideal para aplicar en las cocinas.
Las parrillas de inducción son presentan mucha eficiencia energética, debido a que logran ahorrar hasta un 84% de energía en comparación a una cocina tradicional. Esto ocurre debido al mecanismo de calentamiento que estas parrillas eléctricas tienen, en donde el aparato comienza a calentar una vez que está en contacto directo con la base de algún utensilio.
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Al no contar con ninguna flama que sobre salga de la parrilla, el proceso de cocinar se hace más aseguro y evita las posibilidades de ocasionarse quemaduras graves en las manos. No solo eso, sino que al no haber flamas el ambiente no se ve contaminado y es mucho más cómodo cocinar sin humo ni olores.
Tampoco ocasiona problemas de la salud debido a que la calefacción generada en el sartén no emite ondas electromagnéticas.
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La superficie de las parrillas de inducción no es del todo lisas, además de que no se queman. Esto evita tener que lidiar con los restos de comida que quedan adheridos, haciendo que la limpieza de la zona lleve muy poco tiempo. Esto genera que la vida útil de la parrilla sea mucho mayor y que su aspecto no se desgaste.
Al día de hoy, las parrillas de inducción mantienen un precio elevado debido a toda la tecnología y mecanismo que cuentan. Sin embargo, conforme vaya incrementándose la demanda, el precio se reducirá notoriamente.
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Otro de los puntos negativos a destacar de este tipo de parrillas es que dependen mucho del suministro eléctrico. Esto parece bueno, pero en los momentos de cortes de luz o cuando la electricidad falle, no se podrá hacer uso alguno de las parrillas. Esto dificulta al momento de tener que preparar alguna comida en los momentos de apetitos.
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