Maleables y versátiles, son una variedad de plantas que se suma con comodidad a proyectos de lo más diversos: pueden ser el marco perfecto para un enorme jardín, embellecer un pequeño balcón o integrarse tranquilamente a un living o una oficina. Conocé los tipos de arbustos que existen y cuál se adapta mejor a lo que buscás.
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Para entender qué es un arbusto tenemos que saber que es una planta de tipo leñoso, cuyas delgadas ramas crecen desde su base y se ramifican, y su altura no es de más de uno o dos metros, salvo en algunos casos.
Se suelen usar como plantas de relleno o para delimitar o cercar zonas, y hay variedades perennes, caducos, trepadores, con flores, con frutos y más.
Tipos de arbustos: características básicas
El abanico de opciones es amplio, tanto en colores como en tamaños y variedades. Aquí, un breve repaso de las características de los distintos tipos de plantas:
- Arbustos perennes o estacionales: igual que los árboles, hay algunos arbustos siempre verdes y hay otros que pierden sus hojas durante el otoño. Por ejemplo, el laurel es de hoja perenne, al igual que el viburnum; mientras que la glicinia o el cornus son de hoja caduca. Los primeros son perfectos para cerrar terrenos armando cercas verdes.
- Arbustos de porte derecho o rastrero: si bien las ramas de estas plantas crecen desde la base y no hay grandes diferencias en cuanto a su grosor, los arbustos pueden crecer erguidos (hacia arriba) o pueden ser rastreros (sus ramas crecen por el piso).
- Arbustos con flores o follaje vistoso: si querés tener un espacio de color en tu jardín durante la primavera podés optar por gardenias o camelias.
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- Arbustos con frutos decorativos: hay plantas cuyos frutos son decorativos y son geniales para darle color a tu jardín, y tambiém hay otros cuyos frutos se pueden comer. Ejemplos del primer tipo son el madroño y el granado, y el frambueso es un claro ejemplo del segundo tipo. Quedan preciosos ambos.
- Arbustos con aroma: son perfectos para, además de embellecer, generar además un lugar con perfume que te lleve rápidamente a un clima de calma y relax. El laurel, la lavanda y el jazmín son tres buenos ejemplos de este tipo.
- Arbustos según su tamaño: la mayoría no crece más de 1 o 2 metros de altura. El tipo de arbusto que elijas va a depender de tu gusto y también del espacio que tengas para que crezca.
- Arbustos de sombra o sol: dependiendo de cuánta exposición a los rayos directos del sol tenga tu espacio, tendrás que elegir aquellos que se adapten mejor al sol o a la sombra.
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Arbustos de jardín
Estas plantas son muy típicas en jardines y exteriores porque dan un toque fresco y natural y pueden contribuir a generar espacios de sombra o hasta barreras para días de viento.
Son muy frecuentes los arbustos para cercos. Su mayor bondad es que dividen espacio y, al ser tupidos, generan intimidad y cuidan la privacidad.
A su vez, los arbustos pequeños pueden dar vitalidad a espacios interiores y quedan muy bien en livings, escritorios y hasta en cocinas con espacio.
Cerco vivo de arbustos
Los arbustos son las plantas para cerco vivo por excelencia. Dividen muy bien entre un jardín y otro, formando una bella y tupida pared natural entre ambos. Para sostener este tipo de plantas, vas a necesitar alambre tejido, que será la “estructura” sobre la cual trepará y crecerá hacia arriba.
En cuanto a la forma del cerco, si te gusta más prolijo podés darle forma de vez en cuando con una buenas tijeras de poda o podés dejarlo crecer libre y salvaje.
La ligustrina, las eugenias, la oliveta, la madreselva y la fotinia son opciones perfectas si querés un cerco alto, ya que suelen crecer bastante. El buxus, la corona de novia y el eleagnus son buenas opciones si querés un cerco más bajo y controlado.
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Arbustos decorativos
A algunas de estas plantas las podés usar con fines ornamentales. Te damos los nombres de arbustos decorativos, detallando algunas cuestiones sobre cómo cuidarlos.
- Arbustos con flores violetas: la lavanda es un arbusto perfecto para tener en maceta o colocar en algún cantero. Lo lindo de la lavanda es su inconfundible aroma. Otro arbusto con flores violetas es la hardenbergia australiana, trepadora, excelente para cubrir pérgolas y embellecerlas con su color.
- Arbustos con flores blancas: como ya te contamos, un arbusto tupido y con preciosas flores color blanco es la corona de novia. El jazmín del cabo también es una buena opción para cubrir nuestro suelo con bellas flores aromáticas blancas.
- Arbustos con flores amarillas: le darán un toque vivaz a tu jardín o ambiente con su alegre color cálido y vivaz. La Escoba Lidia es un excelente ejemplo de ésto: arbusto grande y frondoso que florecerá cubriéndose con miles de pequeñas flores amarillas.
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- Arbustos para interiores: si querés una planta que sume vida a tu hogar o tu oficina, podés optar por cualquier tipo de laurel, una variedad que resiste muy bien las condiciones de ambientes interiores.
- Arbustos de sombra: la camelia, la hebe, la hortensia y el acebo son perfectos para tener en lugares donde la luz del sol es muy tenue. Son plantas resistentes y de crecimiento rápido.
- Arbustos de sol: la abelia, el leptospermum y el teucrium azureum resisten muy bien a la incidencia directa del sol. Tenés que tener en cuenta que deberás cuidarlos especialmente, regándolos con abundante agua. De todos modos son plantas resistentes a climas calurosos y también a las plagas.
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