Las hamburguesas son una comida que nunca falla. Cada vez con más frecuencia se las puede degustar en bares y restaurantes, aunque sabemos que nada se compara con las hechas en casa. Te contamos cómo hacer hamburguesas caseras para que las prepares en casa y disfrutes de un plato riquísimo.
Esta comida es una opción perfecta para todas las edades, y hacerlas de manera casera hará que evites comprar las que venden en el supermercado que, no sólo no son tan ricas, sino que además están llenas de conservantes y saborizantes.
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Las hamburguesas son una comida muy rápida que nos salva de cualquier apuro, ya que podemos prepararlas en cantidad, freezarlas y cocinarlas de un momento a otro. Considera que cuantas más especies le pongas a la preparación, más tiempo se conservarán.
El principal secreto para hacer una rica hamburguesa es mezclar carne vacuna y de cerdo, que dará como resultado una mezcla tierna y húmeda por la grasa que se derrite al cocinarla, y esto le sumará un sabor especial.
Otra clave que no puedes subestimar es el pan. Puedes optar por el común, pero también considerar otras variables como los artesanales, saborizados, con semillas, de papa, batata, remolacha, entre otros, que le darán un toque de sabor especial y difícil de igualar.
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Para aproximadamente 10 hamburguesas grandes necesitas:
La preparación de la carne es muy fácil. Lo primero que tienes que hacer es picar muy bien el perejil, la cebolla y el ajo en cuadrados pequeños. Luego, mézclalo junto a la carne de bola de lomo y de cerdo en un bowl grande, y salar y condimentar con pimienta negra. Recuerda agregarle pimentón o comino para que las hamburguesas tengan más sabor.
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Cuando tengas una mezcla homogénea, colócale los huevos y comienza a amasar todo con la mano hasta lograr una buena integración. Para lograr que sea más consistente y crocante, agrega el pan rallado y mézclalo nuevamente. Deja reposar la mezcla alrededor de 1 o 2 horas en la heladera.
Ahora es el momento de preparar los medallones de carne. Puedes hacerlo con molde o a mano. Para esta última opción, haz bolas con la cantidad de preparación deseada y moldéala con la mano. Aplástalas lo necesario para que tengan el tamaño ideal.
Es muy importante que formes un medallón consistente y bien unido para que no se deshaga al momento de cocinarlo.
Una vez que hayas hecho las hamburguesas debes cocinarlas, y para esto se puede optar entre fritas, a la plancha o al horno. Esta última opción es la más sana, y se deben colocar las hamburguesas en una fuente, que previamente debe tener un poco de aceite, y colocar los bifes de carne. Luego, llévalo al horno precalentado por aproximadamente 20 minutos o hasta que estén bien cocinadas.
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Para freírlas, debes calentar un poco de aceite en una olla o sartén a fuego medio y luego freír los medallones. Es importante que la olla tenga antiadherente para que no se peguen. Recuerda freírlas de un lado y del otro, hasta que estén doraditas.
Otra opción es hacerlas a la plancha. Para eso, tienes que calentar la plancha y, una vez caliente, dar vuelta y vuelta al medallón con cuidado para que no se rompan.
Tip: para que te quede aún más rico, lo mejor es que le des un golpe de calor al pan y que le sumes algunos sabores para complementar el sándwich. Algunos ingredientes que quedan muy bien son: lechuga, tomate, cheddar, cebollas moradas, huevo frito, panceta, cebollas caramelizadas, pepino, hongos, palta.
Si preferís una opción al plato, puedes acompañarlas con guarniciones como papas fritas, ensaladas de todo tipo, arroz, puré, entre otras.
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Si bien se puede comprar la carne picada, esto puede generar un poco de desconfianza en algunas personas. Para que eso no pase y te asegures una óptima calidad en tus hamburguesas, lo mejor es optar por una picadora de carne.
Este elemento tritura la carne en varios grosores del mismo tamaño según la preferencia. En general, estas máquinas cuentan con cuchillas tipo hélice que desembocan en un orificio con la carne ya picada. Suele haber dos alternativas disponibles: manuales o eléctricas.
La picadora manual es la más tradicional y resulta un poco más trabajosa porque debemos hacer fuerza a través de una palanca. En cambio, la máquina de picar carne eléctrica opera por sí sola. Al ser automática, tiene mayor resistencia y potencia y no depende de ningún esfuerzo físico.
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