Una maestra de un campo de refugiados fue elegida la mejor docente del mundo

Se llama Hanan Al Hroub, es de Palestina, y acaba de ser elegida la mejor profesora del mundo. Creció en un campo de refugiados palestinos en el que da clases. Debido a una historia dolorosa, en la que sus hijos después de ver un tiroteo camino a la escuela quedaron profundamente afectados, se especializó en el apoyo a niños que han sido traumatizados por la violencia.

Utiliza un método que detalla en su libro “Jugamos y aprendemos”

El método ha conducido a la disminución de los comportamientos violentos en las escuelas, donde esto suele ser un fenómeno frecuente y ha inspirado a sus colegas a revisar la forma en que enseñan, sus estrategias de manejo de la clase y los castigos que usan, según el sitio del premio Global Prize Teacher.

Al Hroub trabaja cerca de Belén con alumnos refugiados, usando juegos dirigidos a la resolución de la violencia y la tensión.

“Estoy orgullosa de ser una maestra palestina en pie en esta etapa”, dijo tras recibir el premio, y agregó:

“los maestros podrían cambiar el mundo”

El anuncio se hizo en el Foro Global de Educación y Competencias 2016 en Dubai.

Los 10 finalistas, elegidos entre 8.000 postulantes de 148 países, se sorprendieron al ver aparecer en la pantalla gigante al Papa Francisco para anunciar a la ganadora.

1457954717_052726_1457955661_sumario_normal

Dijo Francisco:

“Felicito a Hanan Al Hroub por la importancia que le dio al juego en la educación del niño”

Agregó que era necesario recuperar “la merecida posición” de los maestros “como la profesión más respetada de la sociedad: artesanos de humanidad y constructores de la paz y del encuentro”.

Seguí leyendo:

Aldeas Infantiles SOS te invita a dejar una huella a favor de la educación

Finlandia: el país con mejor educación, enseña a leer a los 7 años

“No digas mogólico”: campaña en el mes del Síndrome de Down

5 claves para criar hijos que sean buenas personas, según Harvard

“Miles de Manos” contra la violencia en las escuelas de Honduras

El video que UNICEF pide que todos vean