El sexo es importante en una pareja porque ayuda a mantener viva la pasión y explorar todas las posibilidades de una relación con mucha química. De hecho, a nadie le gusta toparse con una decepción entre las sábanas, pero no siempre es fácil darse cuenta de antemano. Por suerte, la ciencia encontró 10 signos que pueden ayudarnos a identificar cuándo un hombre es bueno en la cama. Aprende a detectar a quien tiene talento como amante, según los expertos.
Cómo saber si alguien es buen amante
Todos sabemos que las relaciones íntimas en la pareja son una parte importante del vínculo amoroso y que el sexo es un ingrediente fundamental para profundizar el vínculo. Sin embargo, la química y el deseo tienen caminos sinuosos y aquello que enciende el chispazo es muy personal.
Si estás interesada o interesado en alguien y deseas compartir momentos íntimos, la duda sobre si será bueno en la cama o no probablemente asome seguido en tu cabeza. La ciencia tiene algo para decir al respecto. Aquí, 10 señales que pueden anunciar un buen pronóstico:
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La actitud, la clave de un buen amante
La prueba definitiva para saber si un hombre es bueno en la cama está en su actitud y su fidelidad al propio cuerpo. Ni cantidad de orgasmos ni despliegue postural: según la ciencia, el único modo de aprobar entre las sábanas pasa por ser auténtico. Así lo afirma la Sociedad Española de Intervención en Sexología: "No hay señales o competencias universales que nos garanticen que somos buenos amantes, porque cada cuerpo y forma de entender el placer es diferente. Pero hay una cosa común en el buen amante, que e el sexo hecho con autenticidad".
No finge ni actúa
Forzar nuestros movimientos o expresiones como hemos visto en una película o leímos en Internet es una mala señal. No hace más que alejarnos de lo que realmente nos gusta y nos pide el cuerpo. El buen amante es el que disfruta con lo que está haciendo. Si notas que alguien está presente, sin ficciones, es una gran señal.
Hay personas que tienen más capacidad para disfrutar y dar placer, y suelen ser aquellas que no temen a su cuerpo
Te hace reír
La persona con buen humor y con capacidad de contagiar alegría tiene, en general, un grado de libertad que nos puede hacer pensar que se moverá sin pudores a la hora de un encuentro íntimo. Al menos podrá reírse de su performance, quitando seriedad a la situación.
Si te hace reír, le daría una oportunidad. El humor enciende pasiones.
Baila bien
Un buen consejo es mirar la forma en la que un hombre mueve la cabeza y sus extremidades para seguir el ritmo de la música. La facilidad con la que coordina los movimientos son una señal de sus niveles de testosterona.
Además, cuando un hombre baila bien atrae a las mujeres (y viceversa). E más: si su ritmo coincide con el nuestro, la compatibilidad está casi garantizada.
Tiene un peso saludable
Estar en un peso adecuado puede significar que nos moveremos bien a la hora del sexo. Un estudio reveló que las personas “rellenitas” disfrutan más en la cama a pesar de que las personas más delgadas tengan un 30 por ciento más de sexo.
Según el premio nobel de medicina James Watson, la grasa refuerza la generación de endorfinas, una hormona asociada al deseo sexual.
Fuma y toma alcohol... Antes sí, ¿ahora?
Durante varias generaciones, los estudios demostraron que el tabaco atraía al sexo. Era tomado como un signo de cierta superación, algo cool. La explicación científica de esto era que los fumadores eran vistos como personas arriesgadas, lo que los hacía atractivos para el sexo opuesto. Sin embargo, hoy podemos decir que eso puede pasar solamente en la adolescencia o juventud.
En tiempos de creciente interés por la salud y el bienestar, para mucha gente el cigarrillo es sinónimo de descuido y genera más rechazo que interés.
Antes, según los expertos, las personas que bebían y fumaban eran un 200% más activas sexualmente que las sanas. Hoy estos datos no están tan claros. Hay tanta gente a favor como en contra.
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Tiene una mascota
Los hombres con mascotas llaman la atención de las mujeres. La explicación es que las mujeres asocian este comportamiento a que el hombre trata bien a cualquier otra criatura, son pacientes y atentos.
Un estudio determinó que las personas con perros tenían el triple de relaciones sexuales que los que vivían con gatos. Los expertos creen que se debe a que sus amos tienen una posición económica elevada, ya que su salario medio anual es bastante mayor que el de los que tienen gatos. Esto hace que posean un nivel de vida más agradable y, por tanto, resulten más atractivos.
Sabe besar
Un buen beso puede ser el presagio de otras habilidades más interesantes. Según los psicólogos, besar es una de las actividades más placenteras para los seres humanos, ya que los labios son una de las áreas con más terminaciones nerviosas del cuerpo.
Si los besos van bien, es muy probable que toda esa química se traslade a la cama. Piel con piel y... Chocan los planetas.
Es humilde
“Dime de lo que presumes y te diré de lo que careces”, parece ser un dicho que se aplica perfecto a esta situación. El hombre que comenta sus proezas sexuales no resulta atractivo para las mujeres. Si realmente fuera un buen amante, no necesitará gritarlo a los cuatro vientos. A veces el humilde es quien sale ganando.
Es creativo
Ser original y único tiene buen pronóstico. La creatividad puede ser un buen indicador de que esa persona te hará sentir cosas extraordinarias. Es una cualidad que genera atracción porque revela que tiene confianza en sí mismo. Además, al no tener que dedicar tiempo y esfuerzo a seguir un "guión", todo ocurre de un modo mucho más fluido y espontáneo.
Cómo mejorar tu vida sexual
Tener una buena relación sexual lleva tiempo, requiere confianza. Se construye. Algunos consejos:
1. Ama a tu cuerpo y conócelo: hay una estrecha relación entre satisfacción sexual, y autoimagen y conocimiento del propio cuerpo. Quiérete, gústate, mímate, descúbrete. ¿Sabías que la masturbación hace bien? Conocer el propio cuerpo es fundamental. La autoexploración y el autoerotismo son esenciales.
2. Mejora la comunicación con tu pareja. Una buena comunicación puede conllevar cierto esfuerzo, pero es importante expresar nuestros deseos; no hacerlo dificulta que la otra persona sepa lo que nos gusta y reaccione en consecuencia.
3. Cuida tu relación: una relación feliz puede traducirse en una vida sexual saludable. La vida sexual mejora cuando la relación es buena.
4. Rompe la rutina. Es clave innovar: la creatividad sexual o erótica es otra habilidad a tener en cuenta. El sexo no está entre las piernas, sino en el cerebro, que es el órgano sexual más potente. La capacidad de imaginar y fantasear es fundamental
5. Olvídate de la cantidad: en el sexo, como en tantos otros aspectos de la vida, menos puede ser más. El sexo no tiene nada que ver con el deporte, no es una competición; solo tiene que ver con dar y recibir satisfacción. Relacionar salud y vida sexualidad con la cantidad de veces que se practica el coito es reducir el concepto a su aspecto genital.
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