Catorce millones en todo el mundo son las personas con un patrimonio de al menos un millón de dólares (excluido el inmueble de residencia), mientras los multimillonarios, aquellos que tienen mil millones de esa moneda (los “billionarios”) son alrededor de, nada más que 2.100 afortunados.
Precisamente los muy acaudalados son lo que alimentan el mercado de los viajes de lujo, un sector que en 2016 creció un 7% y generó negocios por 7.300 millones de euros
He aquí el “identikit” del “ricachón”, según un estudio realizado por la Universidad Bocconi de Milan para el BIT, el gran salón de turismo que se está llevando a cabo en esa ciudad del norte de Italia.
Se trata de personas que rondan los 40 años, consumidores conscientes de sus elecciones, que dan mucha importancia a la familia y a lo amigos, que ambicionan hallar un equilibrio entre el trabajo y la vida personal
Por lo general, aman además las experiencias más que los símbolos de estatus, perciben a la riqueza como un medio para vivir a pleno la vida y adoran los viajes, sin olvidar la enogastronomía y, entre los deportes, el golf.
De donde son los súper ricos de hoy día? Sobre todo de Estados Unidos, China, Japón y Canadá. No faltan por supuesto los millonarios de los países emergentes que se han consolidado en los últimos años: por ejemplo India, Rusia o los países del Golfo petrolero.
Quien es acaudalado por lo general viaja mucho (“frequent traveler”, en el léxico de las agencias y operadores de viajes) y presta poca atención a sus gastos.
El promedio de viaje por persona es de 3.265 euros
El sector del “Luxury Travel” cuenta con una facturación de 185.000 mil euros en el sector de los hoteles y cruceros de lujo, a lo que hay que sumar una parte del volumen de negocios por 112.000 millones generados por la enogastronomía.
La capacidad del sector para crear ocupación es por otra parte impresionante: en Europa los viajeros de lujo generan 1.700.000 empleos, de los cuales más de medio millón, están en un país turístico de punta como es Italia.