La urbanización global, el crecimiento de la población y las preocupaciones medioambientales urgentes crean retos de infraestructura que no pueden resolverse con nuestros actuales modos de transporte.
Hardt, una empresa de tecnología europea que viene trabajando en esta temática del futuro del transporte, se vinculó con la empresa de arquitectura UNStudio para presentar una propuesta de lo que será la “estación del futuro”.
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Los planes de este proyecto incorporan la utilización del Hyperloop, un sistema de tubos de aluminio al vacío que conectarán una ciudad con otra utilizando paneles solares como fuente de energía y que permitirá viajar a 1.200 kilómetros por hora y conectar ciudades de todo el mundo como si fuera una única ciudad.
“El hyperloop no es solo una alternativa realista y viable para volar, va a revolucionar el viaje”, dice ben van berkel, arquitecto principal y fundador de UNStudio. “Proporcionará tiempos de viaje extremadamente rápidos con conexiones directas entre ciudades, permitiendo formas de trabajo completamente nuevas y gastando nuestro tiempo de ocio, lo que a su vez generará una gran cantidad de beneficios económicos, ambientales y de intercambio de conocimiento”.
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Los planos de esta “estación del futuro” que unirá las ciudades de Frankfurt en Alemania con la de Amsterdam en Holanda, fueron presentados en Utrecht, en la primera edición de HyperSummit, un evento que se centró en la posibilidad de realizar el hyperloop europeo.
Desarrollado como una alternativa sostenible al transporte aéreo, hyperloop utiliza tecnología impulsada por paneles solares y puede proporcionar la energía necesaria para alimentarse
El Hyperloop tiene la intención de ser el primer sistema de transporte 100% eléctrico que pueda transportar con seguridad un gran volumen de pasajeros de una ciudad a otra a velocidades y tiempos de viaje sin precedentes
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El equipo de futuros de UNStudio fue invitado a unirse al Programa de Implementación Hardt Hyperloop para ayudar a integrar el sistema en ciudades y pueblos de diferentes tamaños y en diferentes ubicaciones dentro de estas ciudades. En respuesta, la firma elaboró planes para el centro de transferencia hyperloop, una estación que se ha concebido como una serie de componentes de teselado que pueden adaptarse a una variedad de contextos posibles: centro de la ciudad, borde de la ciudad o contiguo a un centro de infraestructura existente , como un aeropuerto.
La red modular comprendería una red de muy alta velocidad y más redes regionales, que conectarán las áreas urbanas y los centros importantes (como puertos y aeropuertos) con la red de ultra alta velocidad. Dentro de la estación, las plataformas son curvas en lugar de ortogonales, mientras que la configuración significa que cada módulo puede tener una función diferente, desde el registro de equipaje o el muelle para bicicletas, hasta la guardería para padres.
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Los arquitectos creen que las estaciones hyperloop podrían funcionar como baterías para la energía solar, lo que podría derivar en un cambio de la dependencia de las centrales eléctricas hacia el almacenamiento de energía que se conecta a las micro redes eléctricas locales. “En un futuro muy cercano, los edificios funcionarán como baterías, suministrando energía no solo para sus necesidades inmediatas, sino también para los servicios públicos circundantes y los modos de transporte”, explica ben van berkel.
La velocidad del sistema (600-1,000 km / h, o 370-620 mph) también permite que los alimentos frescos, o incluso los medicamentos, sean transportados a los centros urbanos, mientras que las existencias pueden reabastecerse mucho más rápidamente. el equipo de diseño también dice que la red podría resultar en una red de espacios de aprendizaje móviles, que conectan varias instituciones.
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Se cree que los lugares de trabajo también se fusionarán alrededor de las estaciones de hyperloops, ya que los centros se convierten en espacios de reunión naturales para los trabajadores ocupados.
El sistema hyperloop usa propulsión eléctrica para acelerar un vehículo de pasajeros o de carga a través de un tubo en un entorno de baja presión. Un vehículo autónomo levita sobre la pista y se desliza a velocidades más rápidas que la línea aérea de largas distancias. Luego de pensar en la idea, Elon Musk desarrolló tecnología hyperloop de fuente abierta, alentando a otros a desarrollar soluciones en el mundo real. En consecuencia, se han formado varias empresas, cada una buscando construir un sistema en funcionamiento.
La investigación ha demostrado que un posible viaje de hyperloop entre Amsterdam y Frankfurt podría tomar poco más de 50 minutos, mucho menos tiempo que en tren o avión. La ruta, que mide 450 kilómetros o 280 millas, podría transportar más de 48 millones de pasajeros cada año. Se estima que el hyperloop ofrecerá una alternativa sostenible para los aproximadamente 2 millones de pasajeros de aviones anuales, lo que ahorrará 83.690 toneladas de emisiones de dióxido de carbono por año.
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