Bullying y sobrepeso: conmovedora carta de la hija de Jorge Guinzburg

Malena Guinzburg tuvo un cambio radical en su cuerpo y publicó en redes una carta fuerte sobre sus miedos y sobre el dolor de sentirse incómoda con el propio cuerpo.

 Malena Guinzburg, de 38 años, además de ser la hija de Jorge Guinzburg, uno de los periodistas más recordados y queridos de los últimos años, es una talentosa artista, identificada como una de las grandes referentes del stand up en Argentina.La actriz, que se hizo conocida gracias a su humor ácido y sus chistes de sobrepeso y desventuras amorosas, publicó un extenso texto en Instagram, en el que habla de su lucha contra el sobrepeso, el bullying y cuenta sus mayores miedos.

La panelista del programa de televisión “Morfi, todos a la mesa”, abrió su corazón como pocas veces lo hizo en su vida y publicó en redes lo que sentía. Contó sobre los complejos que tiene desde chica y cómo hizo para bajar de peso y sentirse más segura con su nueva figura.

Malena comenzó su emotiva carta en las redes diciendo que desde chica hizo miles de dietas y que, sin embargo, se reconoce “gorda mucho más que flaca”. Y que, para “tener un cuerpo más parecido” al que siempre quiso, se sometió a una dieta durante 28 días sin harinas, sin lácteos, sin alcohol y sin productos light. ​Gracias a eso, logró bajar cinco kilos y sentirse más “cómoda” con sus curvas.

Desde marzo, Malena no volvió a comer panes, pizzas, empanadas, ni ningún otro producto con harinas refinadas. Salvo cuando tiene “muchas ganas”. Anda mucho en bici, practica yoga, tenis y empezó electrofitness, una técnica que combina ejercicios para fortalecer, esculpir y tonificar el físico con electroestimulación.

La carta completa de Malena Guinzburg

“Esta es otra selfie más, pero me cuesta escribir el epígrafe. Desde hace un tiempo, cuando subo una foto mía (qué obviamente elijo entre cientos que me saco, como hacemos todos) me dicen que me ven mucho más flaca, me preguntan qué hice y, algunas, me putean si no les contesto. Me es raro hablar de eso, me da pudor, me da poco humilde, y ¡me da miedo volver a engordar! Pero, de verdad, hay chicas que me escriben desesperadas, diciendo que están muy angustiadas y que están engordando, que las ayude, etc. Hice miles de dietas durante toda mi vida, desde que soy chica. Fui a todos los médicos, a grupos, probé todas las balanzas de todos los consultorios y comí miles de gelatinas light. Le eché la culpa a la tiroides (estoy operada), a la retención de líquidos y a los genes. Me reconozco gorda mucho más que flaca. Sufrí bullying toda la vida.

Escribo monólogos haciendo humor sobre el tema, sobre mis complejos. Me es un desafío no hacer más eso. Gustarme

Y no quiere decir que uno no pueda gustarse con kilos de más, al contrario. Sólo hablo de tener un cuerpo más parecido a lo que YO quiero. A sentirme cómoda. ¿Qué hice? En marzo me pasaron un libro que se llama La dieta del metabolismo acelerado, de Haylie Pomroy. Lo pueden googlear y bajarlo gratis. Simplemente, durante 28 días hice la dieta que dice ahí. Sin harinas, sin lácteos, sin alcohol, sin productos light, etc. Me cocinaba, me ocupaba y no me fui de la dieta ni un día. Apenas la terminé me tomé unos whiskys para festejar y me emborraché bastante, ¡feliz! (Esa parte no la dice en el libro).

En ese mes bajé 5kg, aprox. Después de esos 28 días volví a una vida más normal pero no como harinas. A veces, cuando tengo muchas ganas. Pero trato de que no. No me es tremendo. No me cuesta horrores. No soy una infeliz. Ando mucho en bici, hay días que me hago 40km. Hago yoga (es mi terapia para cuerpo y cabeza), ahora retomé tenis y empecé electrofitness. Ah, y ¡me como mis buenos chocolates!

Eso es un poco lo que hice… espero que les sirva y GRACIAS GRACIAS GRACIAS por las cosas lindas que me dicen, de verdad”.