¿Con quién harías tu “burbuja social”? La alternativa que diseñan para salir del encierro

Algunos países que ya pasaron el pico de la curva, como Bélgica, Escocia y Nueva Zelanda, están considerando relajar el aislamiento estricto y permitir que pequeños grupos puedan reunirse.

Si bien nadie sabe por cuánto tiempo deberemos convivir con el coronavirus, todos los especialistas coinciden en que la distancia social seguirá siendo parte de nuestras vidas, al menos en el mediano plazo. Pero este distanciamiento supone un abanico amplio de opciones, que los expertos del distintos países empiezan a barajar. No es lo mismo un espectáculo con cientos o miles de personas que un encuentro de una familia extendida o un grupo si todos están siendo responsables con el autocuidado. Lo llaman “burbuja social”. Te contamos de qué se trata.

Las “burbujas sociales”, algo que pronto empezaremos a escuchar por estos lados, hablan de una nueva alternativa que están pensando países como Bélgica, Escocia, Nueva Zelana y otros para empezar a abrir el confinamiento de a poco, generando pequeños grupos para que las personas puedan empezar a socializar sin que haya grandes aglomeraciones.

Podés leer: ¿Miedo al sexo en la era Post-Covid? La advertencia de los expertos

Es que, hasta que el tratamiento o la vacuna lleguen para ayudarnos a olvidar la pesadilla del Covid-19, la limitación social se ha vuelto la única política sanitaria efectiva frente a un virus que genera contagios masivos. El punto es que, a medida que pasan las semanas, las medidas más estrictas empiezan a tener un impacto severo en la economía y en la salud mental de las personas. Por eso los especialistas saben que habrá que diseñar nuevas estrategias para ampliar la sociabilidad e ir generando, a su vez, inmunidad de rebaño.

Burbujas sociales: el lento camino hacia la libertad

Las burbujas sociales asoman como el método más cercanos para recuperar el contacto con algunos seres queridos en lo que llaman la nueva normalidad.

Frente a este escenario, algunos gobiernos están buscando implementar una estrategia conocida como “burbujas sociales”, la cual permitiría a las personas seleccionar un entorno social con el cual encontrarse y tener contacto físico, siempre y cuando nadie de ese grupo tenga contacto con alguien por fuera de él (excepto ir al supermercado y otras cuestiones esenciales con máximo cuidado).

Según un memorándum del gobierno de Bélgica, las autoridades del país están considerando implementar una medida que permitiría a cada ciudadano elegir hasta 10 personas para formar parte de su “burbuja social”. Esto significa que todos los integrantes de esa burbuja pueden, por ejemplo, juntarse un fin de semana a comer. O ir juntos a un parque. La idea es luego ir ampliando esos grupos de a 10 personas más.

mujer guerrera

Podés leer: Los sí y los no de las familias en cuarentena: claves para disfrutar el «modo casa»

Para asegurar el éxito de la medida, es fundamental que todos los integrantes de ese círculo elijan a los mismos 9 para formar su burbuja de 10, y que nadie vea a otras personas por fuera de ellos. De esta manera, se cerraría la posibilidad de que, en caso de que uno llegara a infectarse, el contagio se expanda exponencialmente.

La implementación de la estrategia tiene sus inconvenientes. No está claro cómo se podría controlar que las personas están cumpliendo con el requisito. Si alguien del grupo interactúa con gente por fuera del grupo, todas las medidas no sirven de nada

En el plano individual, elegir a las 9 personas que conformarían el círculo social podría generar debates y resentimiento difíciles de resolver.

La Primer Ministra de Escocia, Nicola Sturgeon declaró a BBC Radio Scotland que su gobierno estaba considerando expandir la definición de “miembros del hogar” para permitir pequeñas reuniones de gente. “La idea sería alentar a personas que vivan solas a que puedan encontrarse con alguien que está en su misma condición, que se empiecen a generar burbujas de personas”, explicó, permitiendo el encuentro con tíos, primos, abuelos y demás si todos están alineados con un estricto autocuidado.

Nueva Zelanda, uno de los países que mejor ha controlado la expansión del virus, también empezó a implementar una política tendiente a expandir la interacción de las personas. De hecho, fue el primer país en plantear la idea las “burbujas”. En su caso, cada ciudadano podrá incluir en su grupo a familiares o amigos ya fuera de su casa, pero siempre dentro de la misma ciudad.

mezcla de lavandina con agua

Podés leer: Preparación de agua con lavandina o alcohol: cuánto dura el efecto de la mezcla y cuáles son las proporciones

El gobierno articuló la vida bajo el confinamiento en torno a “burbujas de hogares” . Cada persona quedó constreñida a un pequeño círculo social/familiar, el único con el que podría interactuar personalmente dentro y fuera de casa.

La medida ya está en marcha. Según la BBC, a partir de la semana que viene los neozelandeses podrán empezar a expandir su burbuja para incluir familiares, personal de asistencia (enfermeras para adultos mayores, por ejemplo) y personas que vivan solas, siempre y cuando sea en la misma ciudad

Economía y salud mental

La estrategia no tiene el visto bueno de todos, por supuesto. Para algunos, sería arriesgado y prematuro, dado que todavía hay muchos países que aún no tienen la capacidad de hacer tests de forma masiva, un requisito indispensable para empezar a pensar en relajar las medidas de aislamiento.

Según un estudio de sociólogos publicado por la Universidad de Oxford, la forma en que uno estructura sus grupos sociales podría ser un elemento importante a la hora de achatar la curva. Esto quiere decir repensar cómo y con quién interactuamos, y no sólo reducir la cantidad de personas.

Podés leer: Cómo está afectando la cuarentena nuestra salud y cómo revertirlo

Per Block, uno de los autores del estudio, afirmó en una entrevista con CNN que la idea era brindar una suerte de guía sobre cómo se puede armar un grupo social de cara a la nueva realidad en la que estamos inmersos.

Se trata de una suerte de paso intermedio entre el aislamiento y la libertad, para que la gente no abandone la precaución y terminemos con una segunda ola de contagios

Agregó a su vez que forzar a la gente a permanecer por tanto tiempo encerrada no era algo sostenible a largo plazo, ya que traía aparejado múltiples problemas, entre ellos los de salud mental.

Las recomendaciones del gobierno neozelandés son interesantes: “Es importante proteger su burbuja si la extiende. Mantenga su burbuja exclusiva e incluya solo a las personas que lo mantendrán seguro y bien. Si alguien dentro de su burbuja se siente mal, debe aislarse de todos los demás”. Supone una responsabilidad colectiva a rajatabla. En nuestros países, tan sociales y con grupos familiares extendidos amplios, el armado de estos grupos será todo un desafío.

¿Con quién integrarías una burbuja social? Ojalá no sea un nuevo motivo de peleas en las familias y grupos sociales. Si llega esa etapa demandará de todo una gran responsabilidad y mucha generosidad, respeto y empatía.

Te puede interesar: