Scott Groza tiene más de diez años de experiencia enseñando. A través de su trabajo tanto en escuelas públicas como privadas, ha visto cómo los estudiantes pueden ser apartados y prácticamente invisibles en las escuelas en las que se encuentran.
En 2002, Scott y su esposa fundaron The Groza Learning Center, ubicado en California. Comenzó como una visión de Scott y su esposa para ayudar a los estudiantes que estaban luchando en sus esfuerzos académicos. El centro ofrece experiencias integrales de aprendizaje para todos los estudiantes a través de un enfoque holístico de aprendizaje que no sólo considera los requisitos de las juntas escolares locales para la graduación, sino también las necesidades individuales de los estudiantes y sus familias.
En un artículo que él escribió para el sitio Hey Sigmund, Groza explica que nuestras palabras tienen un impacto mayor de lo que podrías imaginar. Los niños a menudo forman su punto de vista de sí mismos y el mundo que les rodea por la forma en que son tratados por sus padres.
“No son solo nuestras acciones las que toman en serio, sino cómo les hablamos y las moldeamos. Usted escucha historias de niños pequeños desesperados por la atención de sus padres y si se descuidan, a menudo se meten en problemas para asegurarse de obtener la atención que desean” cuenta este profesor.
“Parecería que son como pequeñas esponjas, absorbiendo cada pedacito del ambiente alrededor de ellas. Incluso recogerán cosas que no sabías que sabían” agrega Groza
Claro que a pesar de esto, o quizás por esto mismo, cuando los chicos reciben un mensaje de esperanza y los adultos son honestos con ellos, pueden crecer sanamente y los resultados serán seguramente asombrosos, según sostiene este docente.
De todos modos, él mismo reconoce que ser un modelo asombroso a menudo puede ser difícil. El modo en el que reaccionamos durante los momentos de estrés, si tenemos un ataque de rabia mientras conducimos llevándolos a ellos a algún lado o cuando accidentalmente nos golpeamos, será probablemente la forma en que a menudo reaccionan nuestros hijos a esas cosas también.
Pensando en cómo conseguir ser un buen modelo y generar un ambiente fértil para el crecimiento sano de nuestros hijos, Groza comparte 4 cosas que él considera las más importante que debemos decirles a nuestros hijos:
# 1: Estoy orgulloso de ti.
“¿A quién no le gusta oír que están haciendo un gran trabajo? Es posible que los niños no tengan las responsabilidades que les pesan como lo hacen los adultos, pero a menudo trabajan duro para cumplir con las metas que se les proponen. Si consistentemente hacen sus tareas bien sin ningún tipo de argumentos o regularmente traen a casa buenos resultados escolares o académicos, no hay nada malo con decirles que estás orgulloso de ellos. Este estímulo los mantendrá en el camino correcto, donde las palabras negativas y la presión añadida para “hacer las cosas aún mejor2 podrían desanimarlos.”
# 2: Esa es una buena opción.
“A los niños a menudo les gusta ser independientes. Ellos quieren tomar sus propias decisiones, especialmente a medida que crecen. El problema es que no pueden ver el panorama general. No saben por qué no pueden tocar la estufa hasta que se queman o realizar determinadas acciones que tienen consecuencias. Muchas veces, los padres sólo castigan a los niños cuando hacen algo mal, pero no les reconocen el mérito de una buena elección. No tienes que celebrar cada buena decisión que toman, pero reconocerles sus buenas elecciones les ayuda a aprender lo que es correcto, tanto como el castigo les ayuda a aprender lo que está mal.”
# 3: ¡Diviértete!
“Parece que este mundo obliga a nuestros hijos a crecer más rápido y tomar más decisiones de adultos antes de que estén listos. Eso es lamentable. Están tan ocupados obligados a actuar como adultos que olvidan cómo divertirse y ser niños. La vida de un niño debe estar llena de momentos de diversión, imaginación natural y generación de recuerdos que durarán toda la vida. Así que asegúrense de que puedan divertirse”.
# 4: ¡Estoy feliz de que estés aquí!
“No es raro que un niño cuestione su lugar dentro de la unidad familiar, especialmente si tienen muchos hermanos. Con la amenaza del bullying rampante en nuestras escuelas y viviendo tiempos cada vez más difíciles, los niños pueden comenzar a cuestionar quiénes son y si pertenecen o no al grupo familiar del mismo modo que otros miembros. Esto es especialmente cierto si sus padres pasan muchas horas trabajando. Puede que no entiendan toda la situación financiera y piensen que el trabajo es más importante que ellos. Así que debemos tomarnos el tiempo para asegurarse de que saben lo importante que son para cada uno de ustedes y para la familia en su conjunto”.
Groza concluye diciendo que “Nuestros hijos son preciosos. Nunca harás nada más importante que criar a tus hijos para que se conviertan en ciudadanos honrados. Va mucho más allá de mantenerlos alejados de los problemas, pero también estás a cargo de cómo se sienten acerca de sí mismos. Una palabra equivocada puede tener efectos devastadores o curativos”.