Las vacaciones van terminando y el clima y el calendario nos recuerdan que se termina el verano y se acercan nuevamente las clases. Empieza esa época del año en la que los libros, cuadernos y las listas interminables de compras que incluye desde uniformes hasta útiles de los más variados acaparan la atención y el presupuesto familiar.
Cómo el contexto actual requiere que seamos consumidores más atentos y sobre todo informados, es preciso que dispongamos de unos momentos para comparar precios y de esta manera poder comprar con tiempo y no a última hora, algo que nos llevaría a que compremos en el primer lugar que vemos sin importar el costo.
BuenaVibra, de la mano de la Fernanda Bolagay, Asesora en Finanzas Personales de la firma Finanzas Integrales, te presenta un par de tips para que la vuelta a clases no haga temblar el presupuesto familiar y no te lleves a marzo la asignatura de Finanzas Personales:
1 – Reutilizar: chequear qué materiales del año pasado podemos reutilizar: siempre hay cosas que quedaron en buen estado (las lapiceras de colores que aún funcionan, los lápices a los que se les puede sacar punta, las cartucheras que están en condiciones, etc.).
2 – Proveedores mayoristas: si hay más de un hijo, pero también como recurso para pensar a largo plazo. Después de todo ¿cuántas veces al año visitamos las librerías y supermercados para reponer algunos útiles? Pensá también en los útiles que siempre se pierden (¡las gomas de borrar es uno de los clásicos!), para todo esto las compras en cantidad y las segundas marcas son ideales opciones.
3 – Presupuesto: en cada escuela y en cada año habrá libros y materiales a los cuales darle prioridad, y por ende asignarle mayor porción de nuestro presupuesto: para los cuadernos o carpetas, por ejemplo, sí es recomendable asignar un presupuesto mayor, para que tengan una vida útil que resista el año lectivo.
4 – Uniformes escolares: es muy útil realizar un análisis de costo/beneficio. Si el equipo de gimnasia es lo que más se usa, deberíamos asignar mayor presupuesto a esas prendas (zapatillas de alta resistencia, por ejemplo). En el caso de las demás prendas, podemos ahorrar con segundas marcas.
5 – Cuotas: este año comprar en cuotas ya no será gratis, recordemos que esta vigente la ley de precios transparentes que pide al comerciante mostrar los siguientes valores muy claros:
- Precio al contado: efectivo, tarjeta de débito o con tarjeta de crédito en un pago.
- Precio total financiado: es la suma de todas las cuotas en las que financiaste la compra.
- CFT Costo Financiero Total: es el valor de las cuotas + costos de financiación (seguros de vida, gastos administrativos, etc.). Los costos de financiamiento varían de banco a banco y según el tipo de tarjeta, es por eso que debemos estar muy atentos a este valor. No es lo mismo financiar las compras a un 20% que a un 40%.
6 – ¡Ojo con la letra chica en los descuentos!: si el comercio ofrece un 30% de descuento y la letra chica dice que se devolverá hasta un máximo de 500 pesos, da igual si compro $ 2.000 ó $ 3.000 el banco solo devolverá $ 500. En este caso conviene hacer una compra de hasta $ 1.600 para optimizar al máximo el beneficio.
7 – Cuotas y matrículas de colegios privados: se estima que el incremento será de un 20% a un 30% y la recomendación para optimizar este monto es realizar el pago anual y obtener un importante descuento. Se puede llevar a cabo dependiendo de las políticas de cada colegio y sobretodo del efectivo que tenemos disponible.
Bolagay también nos dice que el momento de las compras e incluso la previa de la planificación es ideal para hablar con los chicos sobre el valor del dinero y los diferentes formas de pago. Para ella, esta es una buena oportunidad para fomentar la educación financiera de nuestros hijos. “Niños educados serán adultos que toman mejores decisiones” nos recuerda.