Sentarse a comer una pizza, o una picada o un plato de rabas o papas fritas implica para la gran mayoría el hecho de degustar una cerveza. Esta bebida ya es parte de nuestra cultura y, según un relevamiento realizado por OH! Panel y la asociación Cerveceros Argentinos más del 60% de los argentinos aseguran que eligen tomar cerveza porque es una bebida para compartir.
Más allá de gustos, la cerveza une y es indiscutida en cualquier encuentro social. Pero, ¿qué cosas no pueden faltar a la hora de elegirla?
Estas son las tres exigencias clave de los argentinos:
1 – Según la encuesta, lo primero que buscan los argentinos en una cerveza es que refresque. El 83% considera que el principal beneficio de la bebida es su refrescancia y por eso la eligen. Esto se debe a que es una bebida con poco contenido alcohólico, levemente amarga, cuyos colores van del amarillo brillante al oscuro y opaco y con gran variedad de sabores.
Todos estos factores hacen que sea una opción muy efectiva tanto para la refrescancia como para el deleite. Es importante destacar que el alcohol presente (4,5% promedio) en la cerveza no obstaculiza su efecto hidratante, siempre y cuando se consuma de forma moderada.
2 – Lo segundo que no puede faltar es la espuma. El 80% de los argentinos prefieren tomar una cerveza con espuma, el componente clave que proporciona una cubierta natural a la bebida, conservando la frescura por más tiempo. La misma, ayuda a que no entre oxígeno en la cerveza y de esta forma se evita que no se oxide. Es importante que la espuma sea consistente ya que da sensación de cremosidad y concentra ciertos sabores que la hace más agradable al tomarla.
3 – Por último, pero no por ello menos importante está el sabor. Más del 60% de los argentinos destaca al sabor como el elemento principal por el que consumen esta bebida. Esto es gracias a la combinación perfecta de los cuatro ingredientes que la componen: cebada, lúpulo, agua y levadura junto con el quinto ingrediente cervecero, los diferentes cereales tales como el trigo o el maíz.
La investigación, con la que colaboró el maestro cervecero Luis Scotta, destaca que cada cerveza es concebida en diferentes zonas y momentos, es por eso que llevan ese peso histórico en su creación que se mantiene año tras año, siempre y cuando se respeten los controles de calidad adecuados, y las cervecerías cumplan con las normativas vigentes en cuanto a la inocuidad del producto.
La cerveza es una bebida que invita a ser compartida, genera aporte social y es indiscutida compañera en reuniones con familiares y amigos. Los argentinos la elegimos para diferentes motivos y para diferentes situaciones, de lo que no nos privamos nunca es de disfrutarla en todas sus versiones.