La gente solidaria se sigue sumando y llegan de todos lados para palear arena y embolsarla, para cocinar, para hacer paquetes, para cuidar niños. No descansan desde anoche y sufren al oír a algunos periodistas decir que la gente no colabora.
Literalmente cada ciudadano está aportando su granito de arena. Pergamino DUELE y no necesita palabras que no son ciertas.
Las víctimas de una inundación necesitan toda clase de ayuda. Acercarse a las personas que sufren es algo bueno e importante y eso es lo que hoy pasa en Pergamino.