Los objetivos de una habitación cambian según la edad. Los adultos lo concebimos como el espacio de descanso y relax por excelencia, pero, para los chicos, el dormitorio tiene muchas funciones y sentidos. Es un espacio de juego, un rincón de juguetes y, sobre todo, el ambiente donde hay zona liberada para desplegar la creatividad. Compartimos buenas ideas de decoración de habitaciones infantiles para diseñar un cuarto con mucha onda y, sobre todo, gran funcionalidad.
Los dormitorios para niños son esos refugios donde los niños sueñan las 24 horas: despiertos o dormidos. Lugares de creación, juego y pausa, capaces de potenciar habilidades y recursos emocionales o, por el contrario, limitar el desarrollo saludable. Pensar alternativas y detalles que dejen volar la imaginación sin restringir la practicidad ni afectar el orden es la mejor manera de planificar la decoración del cuarto de los chicos.
Antes de empezar a planear la decoración del dormitorio de los niños hay que tener en cuenta algunas cosas claves: desde el tipo y tamaño de la cama, hasta la ubicación de los muebles y lugares de guardado, dejando espacio para que puedan jugar o hacer una actividad, como la tarea escolar.
A su vez, hay que pensar que la decoración del dormitorio del niño o niña no sea disonante con el estilo general de la casa, porque lo ideal es que esté integrado y que funcionen en conjunto.
Una de las premisas es que los dormitorios para niños deben ser cómodos para los pequeños y funcionales para los padres. A partir de allí es donde comenzamos a pensar en el resto.
Lo peor que puede pasar en un cuarto infantil es que esté repleto de cosas y no haya espacio para que el niño juegue: de eso se trata la infancia y la decoración no debe estar pensada para la foto sino para el desarrollo saludable de las criaturas.
Algunos consejos para una linda decoración infantil:
La elección de los muebles infantiles es un tema a tomar con cuidado, porque hoy en el mercado hay opciones súper atractivas y tentadoras, pero a veces se vuelven complicadas en cuanto a la practicidad: por ejemplo, al momento de tender la cama, algo que haremos todos los días.
En cuanto a la distribución de los muebles dentro del dormitorio, es fundamental tener en cuenta cómo son las paredes, si hay algunas columna o cómo se abren las puertas del placard.
Además, es importante que el mobiliario elegido tenga la capacidad suficiente como para guardar juguetes, tener la ropa ordenada, los zapatos en su sitio y los útiles escolares en orden.
Repetimos: no se trata sólo del espacio de dormir. Para que los niños sueñen despiertos, es esencial que las habitaciones infantiles estén llenas de detalles que dejen volar su imaginación. Y eso no implica sacrificar funcionalidad: en los últimos años, la decoración de habitaciones infantiles vino acompañada de diseños muy prácticos, que resuelven muy bien los espacios y generan rincones aprovechables en todos lados.
Camas en diferentes alturas, camas bauleras, cuchetas o marinera con escritorio o cajones debajo o escaleras que esconden un cajón en cada paso.
Si nos gusta que nuestro hijo haga la tarea escolar en su cuarto, es clave planearlo de antemano y pensar un espacio y mueble delimitado para tal fin.
En cuanto a los pisos, lo mejor es colocar suelos de madera, ya que es un material muy cálido. Otra opción es poner alfombras: además de ser parte de la decoración, aportan funcionalidad y los niños pueden jugar y revolcarse lejos del frío y el peligro. Eso sí: ¡comida afuera! Lo que los especialistas desaconsejan son las baldosas, porque son muy duras y transmiten frío.
Para los varones son perfectas las habitaciones temáticas: con detalles de decoración (como cuadritos, almohadones, objetos, acolchados y demás) podemos generar un ambiente mágico con un motivo que le guste: barcos, nave espacial, superhéroes, fútbol, selva, dinosaurios y más.
Otra opción que se usa mucho es colocar banderines de colores o pintar una pared con pintura de pizarrón –aunque también ahora hay pizarras autoadhesivas-. Lo que se busca es que los chicos disfruten dibujando sobre las paredes sin arruinar la pintura.
Quedan muy bien los organizadores en tonos varoniles, los vinilos y también los baúles para guardar juguetes, pelotas y demás.
Quizá el mundo de las nenas es más fácil a la hora de la decoración. En general, ellas siempre prefieren todo en la gama del rosa y si el mundo se ajusta al de una princesa (o Barbie), mil veces mejor. Aunque no están exentas a tener también un pizarrón o un mundo galáctico. Pero para ellas las estrellas, corazones, mundos de fantasía y muchos peluches pueden ser suficientes. Un mundo marino, donde ellas sueñen a ser la sirenita también puede ser súper creativo.
Cuando los chicos son bebés o muy pequeños la cosa es más sencilla: hay de todo y no hay nada que negociar. Pero la decoración de cuartos para niños de 8 a 10 años es un poco más compleja.
Es un rango de edad en la que a los chicos les gusta explorar, dejar volar la imaginación y compartir tiempo con sus amigos. Es una etapa más “social” y sus habitaciones deben estar preparadas para ello.
Los cuartos temáticos son una buena opción a esta edad, pero van soltando la etapa de superhéroes para ingresar a otros hobbys y usar otro tipo de juegos y juguetes. En esta época, la tecnología entra de lleno y los deportes, la música, las películas y otros entretenimientos ganan terreno y se suman a sus pasiones.
Para las nenas de 8 a 10 años, también podemos pensar una renovación de colores: el violeta, lila o fucsia cobran protagonismo. Los vinilos, tanto para niñas como para varones, son una opción genial para dar un cambio gastando muy poco. Se imponen en todos los ambientes y es bueno probarlos en algún rincón. Los vinilos son la última tendencia para ponerle onda a tu hogar.
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