No sólo es una amenaza para el Planeta sino que afecta a diario la salud de gran parte de la población mundial: la contaminación atmosférica es uno de los problemas ambientales más preocupantes en términos sanitarios. Por eso cada vez más voces se alzan en favor de la necesidad de tomar conciencia e implementar estrategias para minimizar daños, ya que incluso en el interior de las viviendas se acumulan contaminantes peligrosos como los compuestos orgánicos volátiles.
Un estudio presentado esta semana en el congreso de la Sociedad Americana de Química demuestra la capacidad de algunos tipos de plantas de interior para depurar el aire. Y revela que la mejor alternativa para reducir la contaminación en nuestras casas es sumar al hogar la guzmania (Guzmania lingulata), una planta de interior fácil y llena de color, que disfruta de la calidez y los lugares bien iluminados.
Según la investigación, la guzmania es capaz de absorber más del 80 por ciento de los contaminantes
El equipo liderado por Vadoud Niri, profesor de la Universidad Estatal de Nueva York en Oswego, enfatizó que “rodearse de ciertas plantas puede combatir los efectos potencialmente nocivos de los compuestos orgánicos volátiles, uno de los grupos de contaminantes más comunes en el interior de las viviendas y oficinas”.
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”Los edificios, ya sean nuevos o viejos, pueden tener altos niveles de compuestos orgánicos volátiles en su interior, a niveles tan elevados que incluso pueden ser detectados por nuestro olfato”, destacó Niri, al presentar el estudio ante 9.000 expertos.
Los COV son compuestos de origen natural o artificial -como la acetona, el benceno o los formaldehídos- que se emiten en forma de gases y puede causar efectos sobre la salud a corto y largo plazo. Las fuentes artificiales de este tipo de compuestos pueden ser desde pinturas, muebles e impresoras, hasta productos de limpieza e incluso la ropa tratada en las tintorerías.
“La inhalación de grandes cantidades de compuestos orgánicos volátiles puede llevar a algunas personas a desarrollar síndrome del edificio enfermo, lo que reduce la productividad e incluso puede causar mareos, asma o alergias”, describe el estudio.
En sus experimentos, los autores del nuevo estudio construyeron una cámara sellada que contiene concentraciones específicas de varios compuestos orgánicos volátiles, e hicieron un seguimiento de las concentraciones de ocho tipos de COV durante varias horas introduciendo en la cámara cinco tipos diferente de plantas de interior.
”En base a nuestros resultados, podemos recomendar las cinco plantas de interior sometidas a la prueba como elementos efectivos para reducir ciertos tipos de compuestos orgánicos volátiles en lugares específicos”, dice Niri. A la cabeza de la lista, el líder del estudio sitúa a la Guzmania lingulata, “una planta muy efectiva en la eliminación de seis de los ocho compuestos orgánicos volátiles estudiados; capaz de absorber más del 80 por ciento de cada uno de estos compuestos durante el período de muestreo de doce horas”.