La carta se dió a conocer después de que su hijo, el destinatario de la carta, la publicara en Twitter. El hombre explica en la red social que su papá en los últimos meses no lo reconocía y que encontró la carta dos días después de su fallecimiento.
Cuenta que la encontró de casualidad, ya que su padre había sembrado muy bien un sutil camino para que pueda llegar a ella en el momento que más lo necesitaba. La había dejado escrita en una computadora.
En la carta el padre expresa sus deseos. Entre ellos están que no velen, ya que no quiere que sus nietos lo vean en esa situación. También espera que lo recuerden ya que esa es la manera que tiene para seguir vivo, y en la carta asegura que, hizo lo mismo cuando partieron sus abuelos. Relata que le hubiera gustado poder acompañarlos durante más tiempo, sobre todo para ver a sus nietos crecer.
La carta fue escrita el 22 de mayo, justo 4 meses antes de partir. Su hijo la comparte ya que es un profundo orgullo para él.
Leerla pone la piel de gallina y nos hace creer que los cosas mágicas existen. Justo cuando “Rafa” creía ya no tener nada y sólo la tristeza lo rodeaba, encontró la carta que lo cambió para siempre. Su padre tenía todo pensando, incluso luego de haber partido. Hermosa carta que vale la pena tomarse unos minutos para leer.
Compartimos la carta completa:
Rafa
Si vos estás leyendo esto es porque yo me mudé de barrio. No hagas nada de lo que se hace siempre, que es hacerle pasar a todos por la experiencia traumática de un velorio y a los chicos de ver a su abuelo en un cajón o no verlo. Derecho al crematorio, cenizas y dale un poquito a Marce para Boulogne si te lo pide y el resto tirálo al mar donde y cuando puedas.
Hacé lo necesario para que tus hijos tengan en la memoria a su abuelo, que es la forma de seguir vivo.
Lo estaré mientras me mantenga en el recuerdo de mis nietos e hijos, como yo tengo a mis abuelos en la memoria y el corazón porque dejaron en mi recuerdos imborrables.
Hubiese querido estar con ustedes un poco más de tiempo, pero eso no lo podés manejar.
Espero haber sido un buen padre por lo menos regular, porque me dediqué más a quien más lo necesitaba, y a ustedes los varones los descuidé un poco.
Y creo haber sido un buen abuelo, pensé que llegaría a ver a mi nieta a la que amo profundamente, casada y al Tuti, que a fuerza de simpatía y ternura me fue ganando de a poco, en el secundario.
Los amo a todos profundamente.
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