Se llama David Deutchman y es un señor jubilado de 82 años que trabajó toda su vida en algo muy alejado a los cuidados de la salud. Sin embargo, después de retirarse de sus funciones laborales que estaban vinculadas al marketing, su vida ha dado un giro inesperado. Para él y para sus pequeños “pacientes”.
Desde hace 12 años su trabajo ha sido muy simple y muy bienvenido. Se dedica a sostener en brazos a los bebes recién nacidos prematuros que necesiten calor y comodidad cuando sus familias no pueden estar con ellos.
David visita cada martes la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos (UCIP), y los jueves se encuentra en la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales (UTIN). Y fue por una madre ansiosa por su hijo prematuro que David se hizo conocido en las redes sociales. Una foto de él con un bebé prematuro llamado Logan Brulette publicado en la página oficial del hospital de Facebook el 27 de septiembre se ha vuelto viral.
Lo que ocurrió es que un día en que la madre había dejado a su bebé recién nacido en el hospital para ir a asistir por un rato a su hija mayor, esta mujer al regresar al centro médico se encontró con una escena que la conmovió: el “abuelo” David sostenía al pequeño Logan, que dormía en sus brazos.
La mamá de Logan les sacó una foto y la historia tuvo más de 65 mil compartidos y más de 145 mil likes en la página oficial del hospital para niños de Atlanta.
“Es muy gratificante no sólo porque los bebes lloran y vos podés ayudarlos a que dejen de llorar”, dijo David a la revista People, “hay muchos beneficios de esa conexión de ser sostenido, como cuando un recién nacido pone su cara contra el latido de tu corazón. Llegué a amarlo, pero no sólo por esa interacción con los bebés, sino por toda la atmósfera del hospital”.
David no sólo ayuda a los recién nacidos, también se asegura que las madres tengan apoyo cuando lo necesitan. “Hablo con las madres y a veces agarro sus manos, porque sostenerle la mano a una madre es tan importante como sostener a un bebé”, dijo.
“Estos padres tienen mucho estrés. Tener a alguien que les diga que pueden ir a desayunar y asegurarles que alguien va a estar con su recién nacido significa mucho para ellos. Es importante”.
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