Según un informe publicado por el Wall Street Journal, el “Fortnite: Battle Royal” es el videojuego del momento y los padres no están ajenos a lo que desata el videogame en sus hijos.
A tal punto llega el furor que algunos hasta llegan a contratar entrenadores para que les enseñen a sus hijos los mejores trucos, y elevar el nivel de su juego
Para poder chequear el furor que despierta alcanzaría con decir que hay padres que están pagando entre $10 y $20 dólares la hora a estos tutores, de la misma manera que lo harían con instructores para las materias de la escuela o los deportes.
“Hay presión no solo por jugarlo sino por ser realmente bueno en eso”, le comentó al periódico Ally Hicks, quien pagó por cuatro horas de lecciones para su hijo de 10 años. “Puedes imaginar cómo fue eso para él en la escuela”, agregó.
En algunos casos, los padres pagan lecciones para mejorar sus propias habilidades y no pasar vergüenza frente a sus hijos, e incluso como una forma de enriquecer su relación con ellos y reforzar sus lazos.
Otros, en cambio, obnubilados por el éxito de las estrellas de Twitch (un servicio de streaming de partidas de juegos) que se muestran jugando al Fortnite, lo que buscan con las clases particulares con tutores es sus hijos se vuelvan jugadores profesionales.
En algunos casos, la inversión da sus frutos: Nick Mennen le dijo al Wall Street Journal que su hijo de 12 años, Noble, mejoró notablemente su rendimiento. “Ahora logra de 10 a 20 victorias”, aseguró.
Los entrenadores son contratados a través de redes sociales, o mediante sitios que se dedican exclusivamente a ello, como Bidvine o Gamer Sensei. En estos, asimismo, no solo se ofrecen lecciones del juego furor de Epic Games, sino que también se pueden encontrar instructores para títulos como League of Legends, Overwatch y Rocket League.
La demanda por este tipo de tutores seguramente seguirá creciendo, ahora que el juego alcanzó los 125 millones de jugadores.