Desde aquellas épocas que hoy nos parecen remotísimas cuando hizo su aparición la primera TV, hace más de un siglo, paradójicamente el cambio ha sido lo único que se mantuvo constante con respecto a la manera en que consumimos los contenidos multimedia. Pero desde hace algunos años, se está viviendo una revolución que conlleva un cambio mucho más profundo.
Los espectadores ya no dependen de una grilla que les marca que mirar, sino que pueden decidir qué ver, cuándo verlo y dónde verlo. “Esta es la democracia de los medios”, dice Martín Errante, Gerente de Producto de Moto Argentina.
A raíz del consumo a través de distintos dispositivos y contenidos on demand, la figura del televidente pasivo sentado frente a una pantalla forma parte del pasado. Hoy, se puede consumir entretenimiento en lugares que nunca se hubiera imaginado. Desde disfrutar de una película durante un viaje, mirar una serie en el camino hacia la oficina o simplemente disfrutarlo en casa, ya no somos necesariamente esclavos de la TV.
Este hecho queda confirmado cuando vemos el crecimiento de plataformas como Netflix, que reconoció a mediados de enero haber tenido el incremento trimestral más importante desde que se lanzó hace diez años, llegando a más de 93 millones de usuarios.
Y así como cambia la manera de consumir contenido, también se transforman los dispositivos que se utilizan para ese fin. Y es allí cuando los dispositivos móviles empiezan a cobrar cada vez mayor protagonismo.
“Con el desarrollo de las nuevas tecnologías vemos cómo el público está migrando de los televisores tradicionales a otros dispositivos para seguir sus programas favoritos, transformando así el consumo multimedia.”
“Ahora, ver tus programas favoritos, donde quieras y cuando quieras es posible utilizando sólo tu Smartphone. Pero, como a veces se vuelve un tanto tedioso ver desde la pantalla no tan grande del dispositivo, Moto reimaginó lo que un smartphone puede hacer”, agrega el gerente de producto de Moto Argentina.
“Con el Moto Z Play y el Moto Mod Insta-Share Projector, en lugar de darte un poco más de pantalla, te da la posibilidad de proyectar y compartir hasta 70’’ en superficies planas, con visualización prácticamente desde cualquier ángulo, con su ajuste automático de trapecio”, dice Errante.
“Además, el proyector cuenta con una batería independiente a la del Moto Z Play, con autonomía de hasta una hora que se suma a la del smartphone, y viene con un pie de apoyo integrado, para que puedas apoyarlo donde quieras.”
La industria de los smartphones fue construida sobre la premisa de pensar diferente, de romper paradigmas, y Moto va por el camino de una verdadera innovación, esa que si lo querés, te permite llevar un cine en tu bolsillo.