Intentando estar siempre a la vanguardia en innovaciones, tanto en el campo tecnológico como en materia de las ciencias sociales, los educadores de Estados Unidos están llevando adelante una cruzada que aúna los esfuerzos para vencer el sedentarismo infantil con los esfuerzos por conseguir animar a los chicos a que lean.
Es por ello que en el estado de Carolina del Norte implementaron nuevo método educativo, que se llama Read and Ride, a través del cual pretenden fomentar el hábito de lectura junto con el hábito saludable del ejercicio.
El programa propone a los estudiantes asistir a una sala de lectura de la cual fueron retirados los bancos y las mesas de lectura y en su lugar se instalaron bicicletas fijas para que ellos puedan leer mientras pedalean en sesiones de aproximadamente 25 minutos.
Estadisticamente, al acabar el curso los resultados fueron espectaculares ya que desde 2010 (año en que fue implementado el sistema) a este año, la capacidad lectora de los chicos que habían participado más en este método educativo había aumentado un 83%. Los que no habían participado tanto consiguieron mejorar esta competencia tan solo un 41%. Esto se debe, según indican los responsables del programa, a que muchos chicos se sienten frustrados mientras leen y al poder pedalear no solo logran liberar la tensión que almacenan mientras están sentados sino que además sienten que son más productivos, los alumnos disfrutan siendo más activos.
La idea se le ocurrió a Scott Ertl, un consejero educativo de Carolina del Norte, mientras él mismo leía montado en la bicicleta estática en el gimnasio. Él ha explicado que «muchos escolares con sobrepeso viven en lucha constante con las actividades deportivas porque no quieren ser siempre los últimos o ser los que pierden y en las bicis pueden marcar su propio ritmo y esforzarse a su nivel sin que nadie note si van más despacio o si se toman un respiro»
El programa, que ha tenido buena aceptación por parte de las familias de los chicos involucrados también ha levantado algunas críticas.
Principalmente algunos sostienen que la actividad física que implica andar en bicicleta debería hacerse al aire libre, en la vía pública. Creen que podría mejorarse sacando las bicis a las calles de la ciudad para aprender educación vial y sensibilizar a los pequeños y a quienes pasen frente a ellos en autos sobre el uso de la bicicleta como método de transporte alternativo y sustentable.
Por otro lado ha ganado algunos opositores que consideran que esta opción “multitasking” prepara a los chicos para estar desenfocados haciendo varias cosas a la vez pero ninguna con la debida concentración, algo muy común hoy en día y bastante criticado por los especialistas.
Por último, también se alzaron voces que sostienen que cada actividad debe ser fomentada individualmente, tanto la de leer como la de hacer deporte, por las personas que deben encargarse de ello, que son nada más ni nada menos que los padres.
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