Si decimos infidelidad, el estereotipo es el hombre que engaña a su mujer y no al revés. Sin embargo, eso cuadra en parámetros anacrónicos y no se acerca para nada a la realidad.
Un estudio reciente de la Universidad de Indiana demostró que las mujeres engañan a sus parejas casi tanto como los hombres.
Esto es porque el género no tiene tanto que ver con nuestra tendencia a la infidelidad pero sí otras características de nuestra personalidad como la inteligencia.
El protagonista de Mad Men, Don Draper es un hombre respetado con una trayectoria impresionante en la publicidad pero no puede dejar de engañar a su mujer.
La idea del hombre brillante de negocios con la secretaría es el primer estereotipo que se nos viene a la cabeza cuando pensamos en infidelidad.
Sin embargo, la ciencia dice que es menos probable que los hombres más inteligentes quieran engañar a sus parejas.
Un estudio publicado por el Social Psychology Quarterly demostró que los hombres con un coeficiente intelectual más alto sentían menos deseo de engañar a sus parejas. Pero no todo lo que brilla es oro: esto no quiere decir que engañen menos a sus parejas, simplemente que lo desean menos.
La ciencia dice que es menos probable que los hombres más inteligentes quieran engañar a sus parejas
El autor del estudio Satoshi Kanazawa explica que “los hombres más inteligentes tienden a valorar más la monogamia y la exclusividad sexual que quienes son menos inteligentes”.
Pero la preferencia y el comportamiento son diferentes. Si bien los hombres más inteligentes sienten menos deseo de engañar a sus parejas, lo hacen de todas formas.
Por el otro lado, los niveles de inteligencia entre ellas no afectaba que tanto eran infieles.
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