En Francia se está tratando una ley que propone que en las escuelas deje de usarse el “mamá” y “papa” para referirse a los progenitores de los niños debido a que esto puede ofender a aquellos niños con padres del mismo sexo.
Los revuelos en torno al tema se dan ya que para algunos es una -posible- ley para mentes demasiado abiertas y “modernas”, mientras que otros sostienen que está muy bien que se refiera a cada padre de los niños cómo realmente es, ya que hay familias que no cumplen con las reglas impuestas tradicionalmente y no hay “mamá y papá”. La ley propone que a partir de este momento se utilicen las palabras “padre 1” y “padre 2”.
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Un punto sin dudas positivo es que esta medida es el inicio de un proceso legal para dejar de ofender a los padres de niños del mismo sexo. Esta medida es impulsada debido a que muchos se sienten discriminados porque en los colegios se reproducen las formas tradicionales para referirse a sus progenitores.
Pero a pesar de lo bien intencionada que puede llegar a ser la iniciativa que plantea se cambie ‘mamá’ y ‘papá’ por ‘Padre 1’ y ‘Padre 2’, en algunos sectores no ha sido bien aceptada.
Diversas figuras políticas francesas como Valerie Petit, diputada de la Asamblea Nacional Francesa, defienden esta medida diciendo que es importante “anclar la diversidad de familias con niños en la ley”.
A pesar de que la ley va muy bien encaminada y se espera que sea aprobada, surgen algunas dudas en relación a cómo se asignaran los números uno y dos a los padres y eso podría generar diferencias.
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