Belén, la ciudad donde nació Jesús, espera la Navidad colmada de luces y esperanza

La calma relativa que se vive en estos días en la Cisjordania ocupada por Israel ha permitido que en esta Navidad la ciudad de Belén pueda ver nuevamente sus calles llenas de turistas y viajeros de todas partes del mundo que van a pasar allí la Nochebuena esperando las 12 de la noche en la tierra donde nació Jesús.

Belén es una ciudad palestina situada a unos 9 km al sur de Jerusalén y enclavada en los montes de Judea. Desde diciembre de 1995, se encuentra administrada por la Autoridad Palestina. Su población era de 25.266 habitantes en 2007, de los cuales la mitad son musulmanes y la otra mitad cristianos, en su mayoría ortodoxos.

Muchos de quienes estén allí la noche del 24 de diciembre irán sin duda a La Basílica de la Natividad que está construida sobre la gruta de nacimiento de Jesús y desde 2012, la Iglesia de la Natividad y la ruta de peregrinación en Belén figuran en lista de la UNESCO de los sitios de Patrimonio Cultural de la Humanidad.

Elias Al-Arja, de la asociación de hoteleros de Belén, dijo que los problemas de la región circundante habían aumentado las cifras en la Tierra Santa bíblica y que las reservas habían aumentado ya el año pasado.

No debemos olvidar que el turismo es una fuente importante de ingresos para la economía palestina y proporciona medios de subsistencia a unas 5.000 familias en Bethlehem, que cuenta con 5.000 habitaciones en 46 hoteles.

En las horas previos a a medianoche del 24, la gente se congrega en el árbol de Navidad en la Plaza de la Mancomunidad, donde los coros cantan villancicos durante las fiestas.