Además de ser buenos y ricos en fibra, los humildes cuscús integrales son ricos en cobre, un mineral que nuestro metabolismo necesita para funcionar a la perfección.
Ingredientes
Para 2 personas
Preparación
1 – Preparar seis palitos de brochettes de madera que quepan en una fuente para horno antiadherente grande y colócarlos en agua fría.
2 – Quitar las extremidades fibrosas de los espárragos y pone al fuego en una sartén a fuego medio, girando de vez en cuando.
3 – Mientras tanto, colocar las arvejas y el cuscús en un tazón, junto con la ralladura de la cáscara del limón, y cubrir con agua hirviendo. Cubrir con un plato y dejar que el cuscús absorba el agua.
4 – Cuando los espárragos estén listos, pasarlos a un plato, cortar las almendras en láminas (o picarlas) y ponerlas a tostar en una sartén hasta que estén doradas.
5 – Utilizar la base de la cocción de esa sartén para sazonar ligeramente las pechugas de pollo y luego introducirlas en los palitos de madera de brochette cortadas en partes iguales.
6 – Sazonar las pechugas ya cortadas con una pizca de sal marina y pimienta negra y frotar con una cucharadita de aceite de oliva.
7 – Colocarlas en la fuente de horno durante 10 minutos o hasta que estén dorados y en el punto, pero aún suculentos, girándolos cada 2 minutos. En el último minuto, volver a colocar los espárragos en la fuente para calentar.
8 – Mientras tanto, en un recipiente colocar los tomates secos y procesarlos. Luego mezclar la pasta de tomate con el yogurt y la mitad del jugo de limón hasta obtener una mezcla cremosa.
9 – Con un tenedor, soltar el cuscús, regar con el resto del jugo de limón y añadir las hojas de menta finamente picadas.
10 – Cubrir las pechugas con las almendras crocantes. Servir junto con la preparación de cuscús y arvejas y con los espárragos.
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