Arquitectura solidaria: espacios de inclusión y amor en Rosario

En Rosario, Argentina, un grupo de estudiantes y docentes de la Facultad de Arquitectura levantaron ellos mismos un edificio de 50m2 para que los chicos del Barrio Industrial de Granadero Baigorria tuvieran su lugar.

“Articular los saberes académicos con los populares y poner la disciplina al servicio de los sectores más desfavorecidos por las inequidades socio-económicas y culturales como parte del compromiso de la universidad publica con la sociedad “. Este es uno de los conceptos fundantes del grupo Matéricos Periféricos, movimiento cultural independiente fundado en 1994 por un grupo de estudiantes y docentes de la Facultad de Arquitectura, Planeamiento y Diseño de la Universidad Nacional de Rosario, Argentina.

Ya desde aquel entonces y cada vez con mayor compromiso, Matéricos Periféricos tiene el objetivo de promover las arquitecturas latinoamericanas emergentes, contribuir intelectual y activamente al desarrollo de la teoría y la práctica de la arquitectura y poner la disciplina al servicio de los sectores populares más afectados por las inequidades socio-económicas políticas y culturales y de los territorios amenazados por prácticas ecológicamente insustentables.

A cargo de los innumerables proyectos realizados por este grupo (los ya ejecutados y los que están realizándose), encabezando un numeroso grupo de arquitectos, docentes y alumnos de distintas cátedras taller de la Facultad de Arquitectura de Rosario se encuentran los arquitectos Marcelo Barrale, quien es hoy docente titular de Proyecto Arquitectónico I, II y III y la arquitecta Ana Valderrama, quien actualmente es la Profesora Titular de Introduccion a la Arquitectura y Análisis Proyectual 1 y 2 de su cátedra.

Ana se ha desempeñado como docente e investigadora de la FAPyD-UNR desde el año 2002 y como profesora invitada de universidades tales como Universidad Torncuato Di Tella (Buenos Aires), IUAV (Venecia, Italia), ASU (Phoenix, USA) y Roma Tre (Roma, Italia).

La trayectoria profesional de la arquitecta Ana Valderrama ha estado enfocada en la obra de interés público, articulando la producción académica y la gestión pública, con especial énfasis en la puesta en valor y la sostenibilidad de territorios periféricos, populares e inestables. Estando a cargo de sucesivos convenios de mutua cooperación entre la FAPyD y la Secretaría de Planeamiento de la Municipalidad de Rosario, Ana ha desarrollado los Planes de Distrito de Rosario, con los que la MR recibe Premio EME 3 en 2010.

Inscribiendose en esta lógica de pensamiento y producción profesional, entre los proyectos destacados del grupo Matéricos Periféricos a cargo de ella, se encuentra el recientemente concluido e inaugurado el 22 de diciembre de 2014 “Copa de Leche en Barrio Industrial de Granadero Baigorria.”

La copa de leche del Barrio Industrial es una agrupación de madres que se unieron para asistir no sólo con alimentos sino también para contener y ayudar en las tareas escolares a un grupo de 150 niños del Barrio Industrial y de asentamientos irregulares aledaños. La institución, a cargo de Valeria Soledad Belén, está funcionando precariamente desde hace aproximadamente ocho meses y cuenta con la ayuda de la Municipalidad de Granadero Baigorria y aporte de partidas de leche y harina, además de la ayuda financiera de algunas entidades solidarias de la zona. Al mismo tiempo, el Programa de Mejoramiento de Barrios (Promeba), está trabajando en el lugar y realizó trabajos de relevamiento social y procesamiento de datos estadísticos en el territorio.

El proyecto se realizó a través de un convenio de mutua cooperación entre la Facultad de Arquitectura, Planeamiento y Diseño de la UNR y la Municipalidad de Granadero Baigorria y forma parte de un conjunto de 4 obras simultáneas que Matéricos en Construcción está llevando adelante en Va. Gdor. Gálvez, Pueblo Esther, Rosario y Gro. Baigorria.

La obra, un edificio de 50m2, fue realizada por estudiantes, docentes y adscriptos de los talleres dirigidos por Marcelo Barrale y Ana Valderrama , junto con los padres y madres de los niños que asisten al comedor.

Como se puede ver en las distintas fotos, la ejecución de la obra fue llevada a cabo íntegramente por los arquitectos y alumnos de la Facultad y por los padres y madres de los chicos que asisten a “La copa de leche”.

Aquella frase con las que nos recibieron los “Matéricos”, mate en mano, mientras aserraban las placas de madera aglomerada y marcaban las barras de hierro para perforarlas y ayudar a armarles el techo a los chiquitos del barrio, se fue haciendo palpable a medida que avanzaban las jornadas de trabajo.

Especialmente cuando la relación entre ellos y los chiquitos del barrio se iba haciendo cada vez más próxima, más profunda, más humana. Apareció Celeste, una chiquita con la ferocidad de la niñez, que desde el primer día se fue haciendo dueña de las herramientas, para administrarlas a la hora del trabajo. Vinieron también Milton y Axel, que se subian al techo apenas se descuidaban los “matéricos”. Huguito, de 13 años, que acompañó a Ana Valderrama toda la obra, y que probablemente haya sido el que mas laburo de todos los que estuvieron en la obra. Nos contó Ana que Huguito tenia muchas ganas de aprender, ahora dice que quiere ir a la universidad. Una vez que estuvo techado, Huguito no faltó ni un solo día, con sol o con lluvia.

Claro que como ocurre siempre en estos caso donde el intercambio es constante, todos se fueron al terminar la obra llevandose mucho más que la experiencia o la satisfacción de la obra terminada. Las instancias de aprendizaje fueron mutuas. Muchos de los padres de los chiquitos del barrio son albañiles o herreros, y al terminar su jornada de trabajo se acercaban a colaborar, por lo que los alumnos de la facultad tuvieron la oportunidad de acceder a un aprendizaje concreto de lo que ocurre en una obra en construcción, experiencia que los docentes que forman parte de “Matéricos Periféricos” consideran elemental en el proceso de formación de los alumnos.

Los “Matéricos” nos cuentan que en diferentes instancias de la obra participaron ya sea con financiamiento o apoyo institucional: la Facultad de Arquitectura Planeamiento y Diseño a través de la Secretaría de Extensión Universitaria; Vicerrectorado, Secretaría de Integración y Desarrollo Socio-Comunitario, Secretaría de Extensión Universitaria, Programa de Prácticas Socio-Comunitarias,y el Instituto de Cooperación Latinoamericana (ICLA) de la Universidad Nacional de Rosario; la Municipalidad de Granadero Baigorria; la Secretaría de Transporte de la Nación; Matéricos Periféricos; el Centro de Estímulo al Desarrollo del Conocimiento (CEDEC); la Asociación Cooperadora del Hogar Escuela Eva Perón; y la agrupación Mujeres por Argentina.

También realizaron aportes voluntarios los estudiantes y docentes involucrados e individuos particulares con donaciones de materiales.

Colaboraron con diferentes tareas ejecutivas y operativas las agrupaciones El Movimiento y Baigorria Joven.
Como resaltan los organizadores de esta obra en su página (http://www.matericosweb.com/) : “Este proyecto se hizo con mucho amor.”