Diez médicos de distintas especialidades que conforman la red solidaria “¿Me regalás una hora?”, creada en 2014 por el cardiólogo Mariano Masciocchi, atienden más de 50 personas en situación de calle cada fin de semana en consultorios montados en tres parroquias porteñas.
Desde principio de año, cada sábado, las iglesias San Carlos de Almagro, San Expedito de Balvanera y Sagrado Corazón, de Barracas, ceden parte de su estructura para recibir, además de los habituales feligreses, a pacientes sin cobertura médica que necesitan atención primaria.
“La idea surgió a fines de 2014 cuando sentí que vivía adentro de una burbuja, ignorando una realidad que estaba en la puerta de mi casa”, explicó a Télam Masciocchi, de 40 años, que trabaja en una empresa de medicina prepaga. Su inquietud derivó en la genial creación de la red “¿Me regalás una hora”?
Su iniciativa, que invita a donar una hora semanal para atender un consultorio médico, servir una mesa o colaborar en un comedor, comenzó cuando Masciocchi se acercó a la Parroquia San Carlos, en Quintino Bocayuva 144, para ofrecer lo único que tenía: su saber profesional y su tiempo.
Con un estetoscopio y un tensiómetro, montó en el lugar un consultorio gratuito para atender a los vecinos los sábados a la mañana. El resultado lo frustró: sólo se acercaron una o dos personas por sábado. “Me di cuenta de que no lo estaba difundiendo como correspondía”, contó a Telam. Fue recién en febrero de 2017 cuando decidió escribir una carta a través de Facebook que se viralizó de forma inesperada: “Buen día, si conocés a alguien que no tenga cobertura médica, que esté en una mala situación y necesite atención médica gratuita y medicamentos, contale que desde hace dos años atiendo los sábados desde las 10 de la mañana un consultorio gratuito a la comunidad en la Parroquia San Carlos de Almagro”.
En la publicación, Masciocchi explicó que “podría atender 10 personas por día pero a veces no veo más que una”. Y se preguntó: “¿Será que la gente no necesita controlar su salud, ni hacerse chequeos, será que todos andan bárbaro? Si tenés ganas y te parece que esto puede servir, contalo”.
La carta, que comenzó como una descarga, se multiplicó en las redes. “Empecé a recibir mensajes de muchos lugares y tuvimos que organizar con el portero de la parroquia el tema de los turnos porque comenzó a llegar mucha gente. Hoy atendemos casi 20 personas por fin de semana y tenemos todo ocupado hasta junio”, explicó.
Con el aluvión de pacientes, se sumaron a la atención solidaria en la parroquia de Almagro una cirujana y un psicólogo, y la red se extendió a San Expedito, en Balvanera, y el Sagrado Corazón, de Barracas.
“En San Expedito, donde los sábados funciona un comedor al que asisten 250 personas, ahora atiende una médica clínica, una cardióloga y una enfermera a personas en situación de calle; y en Barracas, donde los sábados abren las duchas del Sagrado Corazón, ofrecemos atención médica y psicológica”, detalló.
“Aquellos que se quieran sumar y no tienen tiempo físico para ir los fines de semana ceden su espacio en la consulta médica y nosotros derivamos pacientes para que puedan terminar la interconsulta”, apuntó Masciocchi. Con esa modalidad, agregaron a la red infectólogos, ginecólogos, neurólogos, diabetólogos y especialistas en nutrición que donan horas de su consultorio.
Para el cardiólogo, queda mucho por hacer. “Se necesitan más profesionales. No queremos hacer un hospital dentro de la parroquia pero sería buen seguir ampliando la red. Es vital que se acerque más gente a colaborar, sean o no profesionales de la salud. Una hora invertida en los otros puede ayudar a muchos”, concluyó.
Consultá cómo acceder a un turno o cómo ayudar en esta página.
Fuente: Telam