Tomás Chávez es el niño que salió de la mano con Messi en la previa de Argentina-Qatar por la Copa América de Brasil y, como él mismo cuenta con mucha emoción, cumplió su sueño de conocer a La Pulga.
Pero no es solo la emoción de este niño la noticia que hoy se dispara por las redes. Tomás sorprendió a todos al contar qué hizo su ídolo cuando sonó el Himno Nacional Argentino.
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Toto, como lo llaman sus amigos, fue seleccionado como mascota para el partido entre Argentina y Qatar en el estadio Arena do Gremio de Porto Alegre, en el que su querida selección ganó 2 a 0 y se aseguró el pasaje a los cuartos de final.
En una entrevista con el medio El Territorio de Misiones Tomás dijo que:
“Fue una experiencia hermosa, no sé cómo explicar lo que sentí, fue lo máximo, un sueño cumplido”
La jornada fue muy larga. Primero se tuvo que presentar temprano al estadio Arena do Gremio para ensayar y luego del almuerzo su felicidad fue completa al entrarse que entraría al campo de juego con su ídolo Lionel Messi.
“Fue increíble cuando vino. Fue una sensación que nunca más la voy a poder sentir. Me acarició y su mano era más grande que mi cabeza, por eso se rió. Yo lo abracé y le dije un montón de cosas: que lo amaba, que es mi ídolo, que siempre lo había querido conocer y no había tenido la oportunidad”
Con sinceridad e inocencia Toto liquidó las discusiones al revelar qué hace Leo cuando suena la canción patria:
“Él está con la boca cerrada y tararea el himno. Es cierto, al himno no lo canta, pero lo tararea para adentro, yo lo escuché”
Luego agregó que el capitán argentino animó a sus compañeros. “Les dijo ‘vamos muchachos, vamos muchachos’. Después se fue a saludar a los árbitros y a los jugadores de Qatar y a todos los niños que estaban ahí”.
Feliz, terminó contando cómo fue la experiencia de conocer al resto de los integrantes del equipo nacional: “Al Kun Agüero sólo lo vi porque estaba atrás de todos, pero le pasé la mano a Di María, a Dybala y a Lo Celso”.
Sueño cumplido para Tomás que nunca se olvidará de esta experiencia. Ahora falta su último pedido: “Mi sueño es ser mejor que Messi”.
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