Un tablero, dados, cartas y muchas sonrisas. Las tardecitas o noches de juego en familia o con amigos, además de ser divertidas y desafiantes son excelentes para el desarrollo de las relaciones interpersonales. Potencian los vínculos, nos alejan de las pantallas y ayudan a mejorar la comunicación positiva y lúdica entre los miembros de la mesa. Te acercamos una lista de los mejores juegos de mesa para sorprender a los tuyos.
Los valores y capacidades que se ponen en juego en las experiencias lúdicas son muchos. Desafíos intelectuales y cognitivos, habilidades de estrategia y rapidez, trabajo en equipo, superación personal, perseverancia y mucho más. Jugar es crecer en todos los planos y a todas las edades, dicen los psicólogos. Seguro encontrarás opciones a medida de tus gustos e intereses. Conocé los imperdibles.
Dados, cartas, tableros o papel y lápiz: lo que hace a los juegos de mesa divertidos es su capacidad de engancharnos en la dinámica y retarnos constantemente. Te mostramos algunas opciones para jugar sin parar con familia o amigos.
Un clásico indiscutido que apasiona desde hace varias generaciones. El Juego de la vida o Life ofrece la posibilidad de transitar todas las etapas de la vida en unas pocas horas y funciona de la misma manera: con suerte. Los participantes nacen, hablan, estudian, crecen, tienen citas, hacen deporte, realizan pasantías, tienen hijos, se casan e incluso pueden atravesar una crisis de mediana edad.
El juego funciona con un montón de reglas bastante fáciles de comprender y el objetivo es que los jugadores se “retiren”. Gana quien termine el juego con más dinero o logros según las tarjetas del Life.
El Catán nació en Alemania y se transformó rápidamente en un fenómeno mundial. Se trata de un juego que mezcla tanto la estrategia como la astucia y la capacidad de negociación de los jugadores.
El objetivo del juego es tratar de colonizar una isla muy rica en recursos naturales. Para hacerlo deben construir pueblos, establecer rutas comerciales y hacer alianzas, entre otras actividades.
Aunque el juego ya tiene 10 años, continúa siendo furor y ha marcado un antes y un después en lo que es planificación, colaboración y diversión en juegos de mesa. Existe una versión clásica pero también hay múltiples variedades y expansiones para agregar a la ludoteca.
El clásico de internet llegó a los tableros para desafiar a quienes creen que saben todo. Al igual que la versión virtual, se trata de un juego de preguntas y respuestas con seis categorías diferentes: geografía, historia, arte, ciencia, entretenimiento y deportes.
Para ganar, los participantes tienen que conseguir los personajes correspondientes a cada una de las categorías. Para lograrlo se gira una rueda y se eligen al azar las preguntas a responder.
Aunque tiene pocos años, logró posicionarse como uno de los mejores juegos de mesa de los últimos años por lo desafiante y dinámico. Ideal para pasar una noche de juegos con los que más queremos.
Misterio es un juego de mesa tipo policial. Los participantes son detectives y deben descubrir por qué los tenebrosos habitantes de un castillo en Transilvania han desaparecido.
Los datos que tienen los jugadores antes de empezar están basados en leyendas y supersticiones de la gente del lugar. Todo gira alrededor de monstruos y criaturas fantásticas que habitan la zona y que, en las noches de luna llena, regresan para atacar a quienes viven ahí.
Este clásico fomenta la intriga, la curiosidad y la superación personal. Se puede jugar con entre 4 y 6 participantes. Una opción super entretenida que ha ganado los corazones (y mentes) de miles de ludópatas alrededor del planeta.
El TEG es un juego de estrategia geopolítica absolutamente atrapante por su capacidad de desafiar y enfrentar a los participantes. Alianzas, acuerdos, traiciones y objetivos varios son los componentes de este juego que puede durar una noche entera.
Todos los participantes tienen un objetivo secreto, asignado por suerte y desconocido por los demás jugadores. A la vez, hay un objetivo común para todos los jugadores de ocupar 30 países. El jugador que primero logre cumplir su objetivo secreto o el objetivo común, es el que gana.
Se trata de un juego simple, algo caótico y totalmente entretenido. El objetivo es ganar a toda costa, haciendo que los demás pierdan. Una partida puede durar 5 o 15 minutos y cualquier cosa puede pasar: desde jugar Piedra, Papel o Tijera hasta ganar por ser rubio.
Además de la versión clásica existen dos opciones más: una expansión para hacerlo todavía más caótico y una versión nacional que incluye cartas pensadas para Argentina, que pueden hacer definir una partida con un pan y queso.
Si bien la prioridad es divertirse, si sos de los que se toman bien en serio cada jugada, hay algunas técnicas que podés aplicar para aumentar tus chances de ganar. Te contamos cuáles son para que sorprendas a los demás con tus habilidades lúdicas.
7 Wonders es un juego de cartas peculiar para dos a siete jugadores. Su mecánica está basada en el draft: los jugadores eligen una carta de un mazo para luego hacer correr el mazo a otro jugador que repetirá la acción. El juego se divide en tres eras, rondas, en las que se jugarán siempre seis cartas por jugador partiendo de un mazo inicial de siete.
El objetivo del juego es lograr convertirse en la civilización con mayor puntuación al finalizar las tres eras.
El Taboo o Tabú es un juego de mesa que se juega en equipos de dos o más personas. Un miembro del equipo debe conseguir que su compañero acierte una palabra antes de que se agote el tiempo. Para ello, le irá dando pistas pero está prohibido decir las “palabras tabú”, que son palabras relacionadas con la palabra que el compañero debe adivinar. El tablero suele tener un recorrido de casillas y gana el primer equipo que lo complete el recorrido. Es muy divertido.
Un clásico que nunca pasa de moda: es más, es uno de los juegos de mesa comerciales más vendidos del mundo. Está basado en el intercambio y la compraventa de bienes raíces. El objetivo del juego es formar un monopolio de oferta, comprando todas las propiedades inmuebles que aparecen en el juego.
Scrabble, Trivial, Generala, Truco, Ajedrez, TEG, Jenga y más. Son muchas las opciones. Recordá que los juegos no solo sirven para distraer y divertir a los niños y adolescentes sino que, además, influyen en su aprendizaje, su inteligencia emocional y su adaptación social. Pueden ser muy educativos y ayudan a que el niño desarrolle sus capacidades motoras, mentales y sensoriales.
Además, a través del juego los padres pueden conectar mejor con sus hijos, compartiendo risas, logros y frustraciones estrecha más los vínculos. Obligan a los niños de una forma divertida a cumplir las reglas, a tener paciencia, a esperar turno, trabajar en equipo, afrontar los fracasos y disfrutar los logros, mejorando la autoestima. No hay dudas… ¡Jugar es maravilloso a todas las edades! Date un rato para conectar con el mundo lúdico y estimulá tu bienestar.
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