En el momento en que escribo esta nota, lo veo a Delpo dejar “todo” en la cancha, en la búsqueda del oro olímpico.
Consciente de que está superando límites físicos monumentales después del alejamiento obligado del circuito, los nervios me alejan de la pantalla y me pongo a buscar historias sobre estos dos grandes del tenis.
Mirá el video subtitulado en el que en el Masters de Roma en 2008, dos jóvenes promesas ingresaban a jugar la primera ronda: Juan Martín Del Potro y Andy Murray.
La madre del británico colmó la paciencia de Delpo con sus gritos, y éste lo increpó a Murray en uno de los cambios de lado, con el juez tratando de poner paños fríos en el medio.
“Seguís siendo el mismo, no cambiás más. Vos y tu madre, siempre igual”, le disparó un joven Delpo de 20 años a su adversario, quien casi pierde la cabeza cuando escuchó su comentario.
Al ser entrevistado por Susana Giménez confesó:
“Siempre estuvo todo mal porque desde chico me ganó. Y tiene una mamá que es bastante pesada, grita mucho”
Repasó aquel episodio y reconoció que la relación con su oponente no quedó bien desde ese entonces.
Más condimento para la final por la medalla dorada en los Juegos Olímpicos.