Decoración con vinilos: ponele onda a tu hogar

Es la última tendencia y permite renovar espacios y objetos con un gasto mínimo. Hay una enorme variedad de diseños y colores. Claves para decorar con vinilos.

Existen muchas formas de decorar un espacio y siempre la moda sorprende con recursos para renovar ambientes y objetos con pequeños cambios o mínimas intervenciones. Es lo que propone la decoración con vinilos, una tendencia que crece en todo el mundo y que pisa cada vez más fuerte en Argentina. Con frases, dibujos, imágenes y hasta fotos, se multiplican por doquier con diseños cada vez más ocurrentes y permiten darle un toque ‘chic’ a tus paredes, muebles y hasta electrodomésticos invirtiendo muy poco dinero.

Ya sea para la casa, la oficina o un negocio, son una excelente alternativa si querés ponerle un touch personal a un espacio u objeto. Según los decoradores, son el aliado perfecto para dejar volar la creatividad a la hora de sumarle alma a las paredes, puertas, ventanas, muebles, espejos, vidrios, heladeras, pisos y cualquier otra superficie que uno pueda imaginar.

Vinilos para pared

Los vinilos para pared tienen la ventaja de que son súper fáciles de colocar y no requieren una gran inversión, con lo cual, si no te gusta, te cansaste o lo pegaste mal, podés renovarlo pronto. Son un recurso genial, a su vez, para tapar imperfecciones o rayones, que pueden quedar disimulados en apenas minutos.

Además, la colocación no requiere pegamento ni nada especial, y no ensuciás nada ni corrés el riesgo de pegarte los dedos.

La posibilidad más linda que regalan los vinilos es que personalizás un espacio u objeto de manera única y original. ¡Hasta podés hacer un diseño propio y encargarlo! O pedir a un fabricante una frase, un nombre o una palabra que te guste.

 Vinilos para niños

Los modelos de vinilos para niños son las vedette de esta tendencia. Son un recurso genial para poner color y mucha onda a un dormitorio infantil o a un playroom. Y lo fantástico es que podés ir cambiándolo cada un año o dos adaptando la decoración a los gustos de tu hijo. Desde opciones para bebés, súper dulces, hasta diseños futboleros o musicales para adolescentes, te va a sorprender la variedad de diseños que ofrecen hoy los fabricantes y comercios.

Se pueden comprar vinilos de pequeñas y grandes dimensiones, que lleguen incluso a cubrir una pared completa. ¡Hay de todo!

Vinilos para cocinas

Las cocinas son otro de los espacios que están incorporando los vinilos a sus propuestas de diseño y decoración, y no sólo en las paredes sino en todo tipo de objetos y hasta electrodomésticos como heladeras y lavarropas.

Las guardas para pared con motivos gastronómicos y las frases que tienen con la comida y el hogar quedan muy bien en las cocinas, ya que suman un toque fresco y juvenil capaz de levantar radicalmente un ambiente que necesites resetear por algún motivo.

También se usan mucho los vinilos pequeños, aplicados en azulejos de la cocina o en frascos o puertas de alacenas, con algún diseño lindo y colorido.

Dentro de la cocina, las grandes amigas de los vinilos son las heladeras. Los electrodomésticos “intervenidos” están muy de moda, y podés encontrar propuestas muy divertidas para lookear un tiempo tu heladera y ponerle onda a la cocina.

Vinilos originales

Lo mejor de los vinilos es que permite renovar espacios con ideas copadas para cualquier edad (desde bebés hasta adolescentes, jóvenes y adultos) y para cualquier ambiente, baño incluido.

Existen vinilos decorativos con formas de animales, elementos de la naturaleza, figuras de personas famosas, cielos estrellados, frases literarias y motivadoras, utensilios de cocina, siluetas, vehículos, logos, ciudades, pentagramas y notas musicales, monumentos famosos y más. Las posibilidades son realmente muy amplias y hay casas de diseño que hasta arman propuestas a medida.

Vinilos personalizados

¿A quién no le gusta tener un hogar decorado con un estilo propio? Los vinilos son un aliado ideal si tenés ganas de personalizar al máximo un espacio. Basta con contactarse con un fabricante y pedir o llevar el diseño que te guste para lograr un look a medida.

Los vinilos decorativos personalizados hacen volar la imaginación y, aunque parezca mentira, tienen un sutil efecto psicológico: a través de frases positivas o diseños inspiradores, se puede conseguir una gran motivación y satisfacción al contemplarlos.

Cómo colocar un vinilo decorativo

  • Cuando lo recibas, si está enrollado, no lo dejes así durante días, extiéndelo en una superficie lisa, a la espera de que lo puedas instalar.
  • Si tiene varias piezas, cortá las piezas de los vinilos dejando como mínimo un centímetro de distancia desde que se acaba el vinilo.
  • Para colocar un vinilo decorativo en la pared, lo primero que hay que hacer es preparar la superficie donde queremos colocarlo. Hay que limpiarla bien para evitar que quede polvo o cualquier resto que pueda estropear el acabado.
  • También es importante que esté seca, que sea lisa y esté lejos de cualquier fuente de calor.
  • Después hay que medir bien el vinilo y el lugar donde se va a colocar, para evitar que quede torcido o a una altura indeseable.
  • Resueltas estas cosas, se puede comenzar a colocar el vinilo, siguiendo unos sencillos pasos de colocación.

Paso a paso para colocar un vinilo decorativo en la pared

  • El vinilo viene protegido por 2 láminas, una lámina siliconada donde está adherido el motivo, y una transparente que sirve de transportador. Colocá una cinta de papel sobre ésta última, para presentar fácilmente la pieza en la pared y para que sea más sencillo quitar el papel siliconado.
  • Colocá el vinilo sobre la pared o la superficie que deseas decorar, teniendo en cuenta las medidas tomadas anteriormente. Recordá que la lámina transparente (el transportador) debe quedar en la cara exterior y el papel siliconado en la parte de atrás.
  • Fijá bien la cinta de papel a la superficie para que no se despegue durante el proceso.
  • Despegá poco a poco el papel siliconado de la parte de atrás. Debés hacerlo con cuidado para evitar que se rompa o que se pegue de forma indeseada.

 

  • Mientras despegás el papel, fijá bien el adhesivo presionando la superficie con un trapo o la espátula que normalmente viene con el producto. Debés hacerlo desde el centro hacia fuera para eliminar las posibles arrugas o burbujas que vayan quedando. Si se forman en el papel transportador no hay problema, pero asegurate de que no queda ninguna en la zona del vinilo.
  • Sólo queda quitar el papel transportador cuidadosamente. Antes de hacerlo repasá de nuevo el adhesivo para asegurarte de que no quedan arrugas o burbujas. Si después de quitar el transportador observás alguna burbuja, podés eliminarla pinchándola con un alfiler y presionando nuevamente la zona con la espátula.
  • Si el diseño es grande y lo recibís en varias partes, para facilitar el proceso poné primero la pieza más grande y asegurate de juntar bien el resto para que no se noten las intersecciones entre los adhesivos.

Recordá que la gran ventaja es que gracias a que el vinilo es de fácil remoción uno puede estar siempre a la vanguardia con las últimas tendencias en decoración cambiándolo por otro cuando te cansás de verlo o encontrás uno mejor.