Ya sea por deseo o por necesidad, cuando alguien decide dejar de compartir vivienda con sus padres, con amigos o con una pareja y empezar a diseñar el plan de
vivir solo, surgen un montón de inquietudes y problemas a resolver.
No se trata solamente de aprender
cómo vivir solo, que también tiene sus complejidades y fantasmas. Se trata de cosas más prácticas que cualquiera que se lance a esta “aventura” debe resolver.
Para ayudarte a bajar el nivel de estrés, armamos un check list de todo lo que deberías pensar y organizar para que el plan avance sin sobresaltos.
Vivir solo
Si no tienes vivienda propia, lo primero es buscar un lugar temporario.
- ¿Dónde buscar departamentos o casas en alquiler?
- ¿Cómo estimar el presupuesto?
- ¿Cómo se firma un contrato?
- ¿Qué otros gastos fijos se suman al alquiler?
- ¿Cómo se organiza una mudanza?
- ¿Qué muebles y electrodomésticos son imprescindibles para arrancar?
Aquí, las respuestas a todas las preguntas que tarde o temprano vendrán a tu cabeza. Es importante saber que para independizarse hay que invertir en el costo del alquiler, depósito, expensas, servicios y muebles básicos.
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Garantía para alquilar casa
Si cuentas con la garantía de la propiedad de un familiar o conocido no tiene costo. Pero ¿qué sucede si no tienes una garantía? En este caso deberás recurrir a una fianza de garantía privada, como un banco o una compañía de seguros. El costo oscila entre el valor de un mes y medio y dos de alquiler.
Expensas
Dependerá de la ubicación del edificio y de la cantidad de servicios que tenga. Para un monoambiente el costo de expensas puede variar mucho según los amenities.
Servicios
No te olvides del costo de los servicios: luz, gas, agua, etc. que se irán generando una vez que se esté instalado.
Cómo vivir solo
Aunque algunos no lo crean, es una de las preguntas que muchos le hacen a Google cuando encaran la decisión de dejar la casa de los padres o de separarse de una pareja. Es importante tener claro que
vivir solo no es fácil o que requiere, al menos, aprender muchas cosas que deberás enfrentar por primera vez. Lo primero que hay que definir con claridad es qué quieres hacer y qué posibilidades concretas tienes de ir en esa dirección. Sobre todo, si puedes pagarlo y sostenerlo el tiempo que estipule el contrato de alquiler.
Haz un presupuesto “sincero”
Si vas a alquilar, piensa en qué zona te gustaría vivir, en qué tipo de propiedad y en cuántos ambientes. Calcula tus ingresos, pensando que un contrato suele ser por dos años, y no subestimes gastos extras (como expensas, impuestos, luz, gas y agua) ni aumentos por inflación. Si no tienes un ingreso fijo o buenos ahorros, quizá sea mejor esperar o pensar en compartir casa. No vayas más allá de lo que puedes afrontar porque tus problemas se multiplicarán. Una buena opción es alquilar un departamento a dueño directo, porque los gastos de ingreso pueden abaratarse. De todos modos, seguro te pedirán al menos un mes de depósito y uno por adelantado.
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Otros gastos
Si bien probablemente lo tienes claro, no olvides que además de los gastos de vivienda vas a tener algunos otros, como celular, internet, comer y moverte. Inclúyelos cuando calcules el dinero que vas a necesitar para vivir solo.
Busca tu lugar: dónde vivir solo
Internet puede ser tu mejor aliada para encontrar la vivienda que necesitas. Aprovecha los filtros y ajusta tu búsqueda según barrio, ambientes y precio y luego profundiza en los departamentos o casas que te interesen. Guárdalos en favoritos o haz una lista con los links y luego repásalos con detenimiento, averiguando gastos y “letra chica”. De acuerdo a tus posibilidades o intereses puedes buscar:
- Departamentos en venta.
- Departamentos o casas en alquiler. Recuerda que los alquileres en Capital Federal tienen requisitos y gastos particulares. Mira bien todo antes de tomar una decisión.
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Qué chequear en una propiedad
Cuando vayas a ver una vivienda, revisa cada rincón: que tenga luz, que anden las canillas, el inodoro, la ducha. Una vez que firmas quizá te cueste que reparen lo que no anda correctamente. Pregunta cómo es el tema calefacción y chequea que no haya humedad o caños rotos que te traigan problemas. Lo ideal es averiguar cómo es la zona, preguntar a los vecinos si es segura, y también por los medios de transporte.
Cuidado con lo que firmas
Es clave ir despacio y leer bien el contrato (si se lo puedes acercar a un abogado o alguien que sepa, mejor aún). Chequea que no te cobren comisión si alquilas por inmobiliaria (así lo dice la nueva ley), qué ajustes por inflación incluye, y quién se hace cargo de las expensas extraordinarias y el ABL. Pregunta todo y duda si algo no te cierra. Lo que no esté en el contrato queda abierto a interpretación y, cuando eso pasa, el que suele perder es el inquilino.
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Vivir solo: qué necesito
Luego de definir las cosas más importantes y tener claro dónde vas a vivir y cuánto te va a costar, haz un inventario de las cosas para la casa que vas a necesitar.
Cosas para la casa
Algunos electrodomésticos son imprescindibles, como la heladera. Y otras no son tan importante, pero ayudan: microondas, horno eléctrico, lavarropas, aspiradora, etc. Cuenta lo que tienes y anota lo que deberías ir comprando. También es clave reunir algunas cosas para la cocina: ollas, pava o pava eléctrica, cubiertos, platos, vasos, tuppers y algún recipiente tipo bowl para batir, para ensaladas, etc. No olvides el pelapapa, pisa puré, cucharón, repasadores, etc. Infaltable: una mesa con sillas y cama y colchón, de mínima. Y al menos dos juegos de sábanas y toallas. Un sillón siempre viene bien y una mesita o escritorio para la tele o la computadora se volverán rápido en algo a sumar.
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Decoración de la casa
Decorar tu espacio puede ser una gran oportunidad para expresar todo lo que esperás de esta nueva etapa. Ponerlo lindo y mantenerlo limpio hará las cosas mucho más fáciles. Ponle onda y calidez al dormitorio para que resulte agradable estar allí.
Cómo organizar una mudanza
La organización de la mudanza es clave y no deberías subestimar el gasto si tu presupuesto es ajustado. Tampoco minimices el tiempo que demanda embalar todo y acomodarlo en tu nuevo hogar. Puedes recurrir al
Método Konmari para soltar aquello que ya no uses ni necesites. Lo ideal es planificar la mudanza. No caigas en el error de meter todas tus cosas en bolsas de consorcio el mismo día que te mudas. Con tiempo, anota lo que vas a mudar y lo que necesitas comprar y empieza a separarlo.
Guardamuebles
Si te mudas a un lugar pequeño y te sobran cosas que no quieres donar ni vender, puedes pensar en contratar un espacio guardamuebles o averiguar si algún conocido tiene una baulera que pueda alojar tus cosas.
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Pros y contras de vivir solo
Es muy personal hablar sobre las ventajas y desventajas de vivir solo porque a algunos les parece maravilloso y, a otros, la peor pesadilla. Tener independencia en horarios, organización del espacio, decoración, orden y demás puede ser apasionante si valoras esa autonomía. Pero, si no te mudas por elección y no te agrada llegar a casa y no tener con quién compartir el hogar, puede ser duro. En todo caso, cuanto antes aprendas algunos hábitos básicos de supervivencia disfrutarás más la movida y la soledad pesará menos. Barrer, limpiar, ordenar, cocinar, lavar tu ropa, planchar… Un hogar lindo y limpio siempre mejora el ánimo. Más allá de si lo llevas genial o si te cuesta un poco, disfruta tu decisión. Te va a enseñar mucho de vos y podés aprovechar para bucear en lo que eres y en lo que quieres para tu vida. ¡Mucha suerte!
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