Hemos puesto en riesgo las condiciones de la vida en la Tierra. El cambio climático es una amenaza real y concreta que debemos enfrentar con urgencia. Este decálogo actualiza los célebres diez mandamientos desde la mirada moderna de la ecología humana:
I. Amarás a la Tierra, tu planeta, y lo manifestarás cotidianamente
Amo a mi casa que es la Tierra, el planeta que compartimos, y soy feliz si lo valoro cada día.
Por eso me comprometo a llevar adelante las mejores prácticas ambientales que conozca, cambiando las que pueda corregir, siendo íntegro y auténtico.
II. No tomarás los recursos naturales en vano
Cuido lo que la Tierra nos brinda pensando en un mejor presente y en la necesidad de conservar su riqueza para las generaciones que vendrán.
La moderación garantiza la sustentabilidad del resto de las especies.
III. Santificarás los biomas
Celebro la armonía única de los espacios que nos contienen, los biomas.
Y abrazo en la unidad y la diversidad a las comunidades hermanas que los habitan.
IV. Honrarás a tu padre, a tu madre, y a todas las personas
Me honra la hermandad humana, ser hijo de la Madre Tierra y convivir con el resto de las especies.
V. Conservarás y difundirás el valor de la diversidad biológica
Atesoro la esencia de todo lo que me rodea y transmito entusiasmo por el cuidado de la naturaleza.
VI. Evitarás actos contaminantes
Aprendo y coopero para no contaminar nuestro hogar común que es el planeta.
Respeto las leyes y cuando éstas resultan insuficientes me comprometo a apoyar el dictado de nuevas normas o a la mejora de las ya existentes.
VII. No despojarás a las generaciones futuras
Soy austero en el consumo de energía, agua, alimentos y otros recursos.
Concibo mis proyectos respetando los derechos de las demás personas y de las generaciones por venir.
VIII. No darás falso testimonio ni disfrazarás tus acciones
Mi amor por el planeta no es una moda ni una pose, me hace mejor ser humano y es amor por mis hermanos.
IX. No consentirás pensamientos ni deseos que no sean sostenibles
Todo lo que hago es teniendo en cuenta el bienestar general.
Estoy bien dispuesto para reconsiderar malas prácticas y activar otros modos, más sustentables y equitativos.
X. No codiciarás los bienes comunes
Propicio su desarrollo y justa distribución para que las condiciones de vida resulten más armónicas en todo el planeta.