“Llamé por teléfono a la abuela, la única abuela que está en Entre Ríos. Tiene 86 años. ‘Habla Estela Carlotto, y es para darle una buena noticia’, le dije. Ay, dijo, menos mal que estoy sentada. Tanto la buscó, tanto la buscamos todos”, contó Estela de Carlotto al anunciar la recuperación de la nieta 126.
A través de un comunicado, la organización Abuelas de Plaza de Mayo informó la aparición de la nieta número 126. En un comunicado afirmaron que la joven “está feliz de haber conocido la verdad”.
Se trata del quinto nieto en lo que va de 2017. Pero, ¿cómo fue el camino de la asociación durante los últimos 40 años?
Si tenés dudas y querés más información sobre tus origenes, podés llenar el formulario de la Asociación para arreglar una entrevista. También podés llamar o acercarte a cualquiera de las oficinas de Abuelas de Plaza de Mayo.
No hace falta que tengas toda la información o que estés convencido de que querés hacerte los análisis para acercarte a la organización, existe un espacio para hablar sobre lo que te pasa. En el caso de que decidas continuar, el proceso es completamente anónimo y nadie va a enterarse de la duda que tenés.
El trámite de búsqueda se inicia solicitando a la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (CoNaDI) el inicio de una investigación sobre tu origen. Esta investigación se desarrolla de manera absolutamente confidencial y reservada: primero se pide toda la documentación de inscripción de nacimiento a las dependencias estatales correspondientes para relevar los datos necesarios para descartar la posibilidad de ser hijo de desaparecidos a la vez que -en la medida de lo posible- ratificar o rectificar las dudas que te impulsaron a acercarte.
Esta investigación se desarrolla de manera absolutamente confidencial y reservada
Si por vía documental no resulta posible demostrar tu origen, se solicita al Banco Nacional de Datos Genéticos (BNDG) la realización de un análisis comparativo de tu ADN con los grupos familiares de desaparecidos que se conservan allí.
Este análisis es gratuito y suele realizarse ya que la mayoría de las veces las inscripciones son falsas, es decir que no se cuenta con expedientes judiciales de adopción por ejemplo. Se trata de una medida para descartar la posibilidad de ser hijo de desaparecidos. Esto significa que del resultado de este análisis se podrá obtener el origen biológico en caso de incluir en un grupo familiar, o la inferencia de que no se trata de un hijo de desaparecidos en caso de que se excluya de todos los grupos familiares.
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