El 5 de Marzo de 1988 muchos despertamos con la terrible noticia de que el querido Olmedo había caído desde un balcón de un departamento en el que vivía, durante el tiempo que encabezaba una obra teatral en la ciudad de Mar del Plata.
Era el 11° A, del edificio Maral 39 y los primeros minutos de su muerte se transmitieron en vivo a todo el país.
Su obra era éxito de taquilla, pero en su vida íntima las cosas no iban bien. Nancy Herrera, su ultima mujer y testigo de su muerte, había sido tapa de dos revistas, una que la vinculaban con un amigo de Olmedo y otra en la que posaba semidesnuda.
En ese momento, Nancy Herrera declaraba:
“Era muy inquieto, pasó del interior del living hacia el balcón. Para mí eso era normal, pero no fue normal que se ponga a jugar al caballito en la baranda del balcón, estaba boludeando.
Tenía carita de desesperación y me decía que le agarre la pierna, yo le decía que no podía y él me dijo ‘Sí que podés’
Fue lo ultimo que dijo… Traté de agarrarlo, pero se me iba resbalando y yo tenia mitad de mi cuerpo del otro lado del balcón”.
La autopsia determinó que la causa de muerte eran “politraumatismos múltiples” y que había consumido drogas y alcohol antes. Durante un tiempo, la causa osciló entre el suicidio, el homicidio y el accidente, hasta que prevaleció ésta última.
Más allá de toda esta tragedia, al nombrarlo a Olmedo, sin duda aflora una sonrisa.
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