Está claro que tener una billetera abultada puede ayudarnos a comprar mucha ropa y tener gran cantidad de zapatos, accesorios y demás. Pero el dinero no es necesariamente sinónimo de elegancia ni de belleza. Un buen oufit casual te puede convertir en la reina del lugar. La clave está en elegir bien los equipos y seguir algunos consejos de expertos en imagen personal. Tips sobre cómo vestirse bien gastando poco y renovar tu look en pocos pasos.
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Cómo vestirse bien con poco dinero
Podemos arrancar diciendo que “vestirse bien” es algo subjetivo, porque cada mujer tiene su estilo y sus gustos personales. Ese “bien” puede llenarse de significados distintos según quién lo defina. Pero hay ciertos parámetros generales que pueden darnos una base para, luego, explorar opciones y armar tu propio look.
Hay distintos trucos para vestir bien que podemos poner en práctica rápidamente.
- Invertí bien: no tienes que tener el guardarropas rebalsado. La clave está en invertir bien tu dinero, comprar prendas y colores que combinen, con los que puedas armar lindos equipos. Es simple: calidad y no cantidad. Que tengas mucho no quiere decir que lo uses bien.
- Diversifica tus compras: recuerda que vestir a la moda o verse bien no tiene que ver sólo con la ropa: un lindo accesorio, una cartera o un buen par de zapatos puede ser lo que aporte la distinción que estás buscando. Un buen detalle a veces basta para lograr un outfit sofisticado.
- Mantén tu ropa en buen estado: si cada vez que buscas algo para ponerte está arrugado, sucio o con algo de polvo o pelusas, jamás lo elegirás. Tener la ropa lista para vestirla es clave para tener todas las posibilidades a mano cuando te cuesta decidir qué ponerte.
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- No caigas en excesos: estar a la moda suele ser una buena carta de presentación, pero tirarse todo encima puede ser demasiado. La elegancia, hoy en día, está asociada más bien al look casual, más descontracturado.
- Bajo perfil: ojo con las estampas recargadas, los brillos y las texturas muy llamativas. Nada demasiado chillón suele tutearse con lo elegante.
- Convertí a los accesorios en tu mejor aliado: los expertos en imagen personal asegura que no hay look que un buen collar, un pañuelo o un par de aros no puedan levantar. Hasta una sencilla remera blanca o negra puede hacerte brillar con un lindo accesorio en el cuello y/o en la cabeza. De nuevo: el truco fashionista no está en la cantidad. Se trata de cómo aprender a vestirse y no de comprar sin parar.
- Cuidado con las ofertas: es lindo encontrar buenas gangas, pero no compres por comprar. Si no te gusta demasiado lo que estás eligiendo, es poco probable que lo uses. Lo barato es caro si dormirá para siempre en tu ropero.
- Anímate a reciclar: algunas prendas que estén en desuso pueden volver a las pistas si nos animamos a meterles algún cambio. Cortar un vestido, renovar un saco, reflotar un viejo abrigo. Con algo de creatividad puedes recuperar algo viejo y darle una nueva oportunidad.
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Ideas para vestir bien
Uno de los ejes de un buen look tiene que ver con cómo combinar las prendas de vestir. Repasemos algunos consejos.
Invertí en básicos. Lo habrás escuchado muchas veces, pero vale la pena insistir. Es el consejo número uno de los asesores de imagen y expertos en moda. Las prendas básicas son los cimientos de un buen look. Sobre ellos podrás crear muchos estilos y combinaciones, sumando a su vez carteras, zapatos y accesorios.
¿Qué es un básico? Es la ropa que no pasa de moda, los ejes sobre los cuales podrás armar muchos outfits. Los básicos son:
- Camisa blanca.
- Jean.
- Pantalón negro.
- Remera blanca y remera negra. Si es de buena tela, ideal.
- Abrigo negro o trench coat.
- Vestido negro.
- Blazer negro o azul marino.
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Ropa de vestir para mujer
Si bien la ropa de vestir fue siempre la más vinculada a la elegancia y el buen vestir, hoy hay mucha más flexibilidad y el outfit casual puede dejarte muy bien parada en un lugar donde quieres destacar.
Tener a mano un par de vestidos casuales, lisos, con diseños sobrios y colores que te sienten bien, pueden servir como básicos para combinar con accesorios o distintos tipos de sacos y armar diferentes looks para ocasiones muy diversas.
Un error frecuente es enamorarnos de alguna prenda o calzado costoso y poner todo el esfuerzo allí sin pensar cuánto lo usaremos. Si tenemos un presupuesto acotado, es fundamental observar con detenimiento cómo es tu vida, en qué lugares te mueves con más frecuencia y qué es lo que realmente necesitas.
¿Tiene sentido un gran gasto en algo que te pondrás un par de veces por temporada? Si pasas muchas horas en el trabajo, es conveniente invertir en ropa acorde con ese espacio. Si compras con inteligencia y practicidad, tu presupuesto rendirá el doble.
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Cómo vestirse bien en invierno
Cuando hace frío y tenemos que ponernos mucha ropa encima, vestirse bien a veces se complica. Pero en invierno hay muchos accesorios que pueden volver nuestro look más sofisticado. Las chalinas y pañuelos son un claro ejemplo de ello. También lo son los sacos y tapados, que, con un buen par de botas o zapatos, pueden dar un toque elegante al jean más sencillo.
El outfit casual de invierno también tiene sus básicos. Un pantalón negro es un clásico que puedes combinar con casi cualquier cosa y que puede salvarte tanto de día como de noche. Un saco de lana blanco o beige, un par de camisas y remeras de manga larga, alguna polera, un tapado y una campera por debajo de la cola bastan para tener siempre una solución cuando llega el frío.
Los vestidos casuales y polleras suelen ser una opción que te deje bien parada y que puedes volver más o menos elegante con zapatos o con botas.
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Vestidos elegantes para fiestas
Para los eventos importantes, también hay algunos consejos que podemos seguir si no queremos gastar demasiado. Si tienes uno o dos eventos por temporada, puedes animarte a invertir en un par de vestidos para fiestas con diseños o colores más originales. Pero, si tienes muchos eventos y necesitas variar, la clave puede estar en comprar algo más básico, en negro o azul oscuro -o blanco para el verano- y combinarlos bien, con buenos complementos en materia de accesorios y calzado.
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