Confesiones de un detective privado: famosos, infieles y ladrones en la mira

Se llama Jack. Eso dice. Vive en Buenos Aires pero conoce rincones de todo el mundo, y custodia secretos de muchísimos pueblos y ciudades de Argentina, donde nació hace 48 años. Padre soltero, dos hijos, vive en un último piso sobre la avenida 9 de Julio y sus hijos van a un conocido colegio privado de la zona. Profesional, deportista, amigo de sus amigos. Es uno más. Nadie sospecha de qué trabaja.

Ha integrado servicios de inteligencia estatales y ha participado e “investigado” numerosos acontecimientos de trascendencia pública. Es detective privado. De los caros, de los serios. Ha trabajado en varios casos famosos -desde jugadores de fútbol de talla Mundial hasta vedettes de primera línea, pasando por políticos, curas, rabinos, pastores, banqueros, comerciantes y más-.

“Todo se puede investigar”, dice, en diálogo con Buena Vibra. “Personas o situaciones de Argentina o de otros lugares del mundo”, agrega. Su teléfono celular, con números mas fáciles que los de los bomberos, no para de sonar.

Así cómo puede investigar temas políticos de los más serios, Jack también es uno de los especialistas del rubro más buscados para averiguar temas de infidelidad.

“La mitad de los que me contratan son mujeres que quieren saber cosas del marido o el amante. Los hombres quieren averiguar temas de trabajo y dinero, más que de amor”

¿Cuántos años tenés?

48 años

¿Cómo definís tu trabajo? 

Soy detective privado investigador. Integro un equipo equipo estable de cinco investigadores, de ambos géneros. Además, en algunos casos, recurrimos a la contratación de agentes eventuales.

¿En qué consiste el trabajo de un detective privado?

La función fundamental es la de recaudar pruebas, ya sean fílmicas o fotográficas, de un hecho (infidelidad, robo, etc). Para ello, se utiliza la última tecnología, microcámaras, drones, GPS, teleobjetivos, etc.

¿Es legal?

Es legal, es una activdiad amparada en el artículo 19 de la Constitución. No hay ley al respecto, pero sí está reconocida por la AFIP.

¿Cómo te convertiste en detective? 

Trabajaba para el Estado (no te puedo decir dónde) pero al poco tiempo me desilusioné. Me di cuenta de que no era lo que quería hacer, así que salí y comencé a trabajar por mi cuenta.

¿Qué tipo de cosas investigás?

Antes los casos de infidelidad eran prácticamente el 90% del trabajo, ahora no supera el 35%. Investigo temas de dinero, de herencias, búsqueda de personas, y otros temas.

¿Cómo llega un cliente a vos?

A través de la pagina www.detectivesargentinos.com. Además, tenemos muchos referidos de otros clientes.

¿Te contratan más mujeres o más hombres, y para qué temas?

Casi un 50/50, y para todo tipo de temas, desde infidelidad hasta desapariciones de personas, pasando por robos en empresas, robos de empleados, búsqueda de amores del pasado, búsqueda de parientes… El hombre pide más por temas de trabajo que por amor.

¿Te metés en temas amorosos o de parejas?

Sí, por supuesto realizamos investigaciones de infidelidad.

¿Cómo hacés para darle la información si es muy complicada o dolorosa? ¿Qué pruebas ofrecés?

Filmaciones y fotos.

¿Qué fue lo más raro que te pidieron?

Recuperar un canario que le habían secuestrado.

¿Cuánto cuesta contratar un detective?

El valor depende mucho de la zona a trabajar, y de la dificultad.

¿Cuál es tu límite? ¿Qué temas no investigás o rechazás?

Crímenes violentos, narcotráfico o cosas que tendrían que investigar las fuerzas de Seguridad

¿Te contratan famosos?

Un par de veces. En realidad, me contratan más para seguir a famosos.

Más info: www.detectivesargentinos.com