Después de enormes éxitos en el mercado mundial de la telefonía celular, la firma Nokia estuvo un tanto ausente de los primeros planos. Pero ahora ha rergresado y quiere que su vuelta sea triunfal. Por eso, ha desarrollado una tecnología que promete revolucionar algunas funciones, con nuevos teléfonos y con la promesa de revivir lo que una vez fue una de las marcas más populares en ese rubro.
Nokia 8, el nuevo modelo de la empresa, marca la culminación de los esfuerzos para llevar la marca de telecomunicaciones finlandesa de nuevo a la corriente principal del mercado de teléfonos, que comenzó con la nostalgiosa reedición de la versión del clásico teléfono Nokia 3310.
El teléfono inteligente Android, diseñado para competir con el iPhone 7 y el Galaxy S8 de Samsung, cuenta con un cuerpo de aluminio pulido, cámaras Carl Zeiss, audio espacial extraído de la cámara de gama alta de Nokia de 360 grados y una cámara de alta resolución de 5,3 pulgadas pantalla.
Pero la idea que promueve Nokia para ganar terreno perdido no ha requerido diseños muy nuevos. O al menos, podemos decir que se ha basado en funciones ya existentes y que las ha retocado un poco. Estamos hablando de una nueva forma de tomar fotos y videos.
Eso, ni más ni menos, son las bothies, capturas que toman al mismo tiempo fotos o videos con ambas cámaras para que la experiencia sea más completa.
La compañía está empujando lo que llama la “bothie” como la próxima evolución de la selfie, utilizando la tecnología Dual Sight de Nokia para encender tanto la cámara trasera como la frontal al mismo tiempo y grabar videos o que se pueden compartir en vivo directamente a Facebook o YouTube.
“Sabemos que los fans están creando y compartiendo contenido en vivo más que nunca, con los millones de fotos y videos que se suben cada minuto en las redes sociales”, dijo Juho Sarvikas, el director de HMD. “La gente que se inspira por este contenido consume, se inspira y busca nuevas maneras de crear algo original.”
