Ventajas y desventajas de la energía solar

Gracias a los avances tecnológicos, podemos transformar la luz del sol en energía y usarla en nuestro hogar para bajar costos y cuidando el medio ambiente. Pero hay algunas cuestiones vinculadas al uso de este recurso renovable que pueden darnos un dolor de cabeza si no los tenemos en cuenta a tiempo. Antes de tomar una decisión, conocé las ventajas y desventajas de la energía solar. 

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Energía solar: ventajas y desventajas

La energía que emite el sol es inagotable y es una opción muy rentable a largo plazo. Pero, a la hora de pensar en un kit solar para nuestra casa, también debemos considerar cuestiones como el presupuesto, la exposición de sol que tiene el lugar donde colocarás el panel, el espacio que necesitan los paneles, los cuidados que requieren y algunas cosas más.

Repasemos ventajas y desventajas de este tipo de energía limpia para decidir con información.

Ventajas de la energía solar

Cada día, el sol proyecta sobre la Tierra diez mil veces más energía de la que consume en 24 horas todo nuestro planeta. Toda esta energía se puede aprovechar captándola a través de paneles fotovoltaicos (para convertirla en energía eléctrica), o de paneles térmicos (para convertirla en calor o electricidad). 

Son una excelente opción para generar energía cuidando el medio ambiente, ya que esta transformación no produce gases invernaderos.

Si bien la inversión inicial puede ser un poco elevada, tener paneles solares en tu casa es una opción que te va a hacer ahorrar muchísimo a lo largo del tiempo. Además, el costo de mantenimiento de los paneles es casi nulo: son muy fáciles de limpiar (podés hacerlo con una manguera), son resistentes a la lluvia y al granizo y su vida útil es de entre 15 y 20 años. 

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Además, los paneles hacen que la energía eléctrica se mantenga estable. Esto quiere decir que tus electrodomésticos no van a correr riesgo de romperse por un pico de tensión, por ejemplo. El techo de tu casa tampoco va a estar en peligro porque los paneles son muy livianos.

Otra gran ventaja es que la energía solar es una excelente opción para zonas que están más alejadas o aisladas de las grandes urbes y sus servicios. Al instalar paneles solares, estas comunidades pueden acceder a energía limpia, renovable y gratuita sin tener que conectarse a una red eléctrica. 

Desventajas de la energía solar

Una de las grandes desventajas de la energía solar fotovoltaica y calórica es que necesitás una ubicación que goce de buen clima y que reciba mucha radiación solar durante el día.

La energía solar hoy es altamente dependiente del clima, por lo cual es poco recomendada en zonas de prologada nubosidad. En este punto, su eficiencia es bastante pobre si la comparamos con otros tipos de energía. 

El rendimiento de los paneles solares también va a depender de la época del año: hay zonas que en invierno cuentan con pocas horas de luz. Y, por otro lado, la cantidad de radiación que reciban los paneles también va a depender de la inclinación del planeta. Ésta varía durante el año y hace que la luz del sol se refleje de distintas maneras sobre la superficie (más intensa o menos).

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Otro factor tiene que ver con el almacenamiento de esta energía. Hay veces que las horas en las que tenemos energía no coinciden con los momentos en los que la necesitamos. A pesar de que que existen depósitos de agua caliente y baterías solares para almacenar esta energía que sobra, la eficiencia de estos dispositivos es aún muy pobre. Además, son caros.

Paneles solares para casas

Antes de comprar paneles solares tenés que tener en cuenta varios factores. Es bueno empezar por plantearte una serie de preguntas simples pero importantes:

• ¿Cuánto podés ahorrar? Si bien el costo de los paneles y de la instalación puede ser algo elevado, a largo plazo podrás ahorrar bastante dinero al reducir drásticamente el consumo de la energía proveniente de la red pública. Igualmente, el ahorro depende muchísimo de nuestras acciones como consumidores. ¿Dejás cargadores de teléfono o PC enchufados y sin usar? ¿La iluminación de tu casa es de bajo consumo? ¿Usás el aire acondicionado en 24ºC? Si consumís de más por descuido, quizá no veas mucha ganancia en términos económicos.
• ¿Cuánto cuesta la instalación? Te recomendamos consultar con un profesional porque los precios son muy variados. Pero sí te adelantamos que es una pequeña inversión: la instalación tiene un costo que suele ser significativo.
• ¿Cuánta energía se consume en tu casa y cuánto espacio disponés para la instalación? De ésto va a depender el número de paneles que necesites. La cantidad de Kw/w por día que consumís se puede consultar con la compañía eléctrica o podés verlo en la factura.
• ¿Cuán “saludable” está tu techo? También te recomendamos mirar el estado de tu techo y hacer las reparaciones que correspondan antes de instalar paneles.

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• ¿Es buena la ubicación de tu casa respecto al sol? Si vivís en el hemisferio sur, tu techo debería estar mirando al norte para recibir más luz solar; si vivís en el hemisferio norte, al revés. Es importante que tu casa no tenga sombra de árboles, otros edificios o chimeneas. Las horas de recepción solar más importantes son de 10 de la mañana a 3 de la tarde.
• ¿Qué tipo de paneles vas a usar: fotovoltaicos o termosolares? Hay diferentes tipos de paneles solares. Están los termosolares, que sirven para generar energía calórica que podrás utilizar en sistemas de calefacción solar; y los paneles fotovoltaicos, que generan energía eléctrica y son aptos para el consumo hogareño.

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Tipos de paneles solares

En cuanto a los paneles para tu casa, existen tres tipos y tienen distintas características:

• Paneles monocristalinos: a pesar de ser los más “antiguos”, tienen la tecnología que más se desarrolló hasta la fecha. Están hechos de silicio puro y tienen la tasa más alta de eficiencia. Su vida útil es larga y tienen garantía de hasta 25 años. Esto hace que sean un poco más caros.
• Paneles policristalinos: tienen un proceso de fabricación más simple, que hace que sean más baratos que los monocristalinos. Por eso eso son más ventajosos para tenerlos en casa. Lo único que tenés que tener en cuenta es el espacio: como su eficiencia es menor que la de los monocristalinos, vas a necesitar un espacio mayor para obtener toda la energía que necesitás.
• Paneles fotovoltaicos de capa fina: son paneles ligeros que pueden estar hechos de capas de distintos materiales como silicio amorfo, telurio de cadmio, cobre, células fotovoltaicas orgánicas, etc. Sus dos principales ventajas son: su buen rendimiento aún en condiciones de poca luz o sombra y su flexibilidad, que permite que se adapten a casi cualquier superficie.

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También existen las tejas solares fotovoltaicas. Son una opción muy innovadora en el mercado. La principal desventaja de éstas es su precio: son bastante más caras que cualquiera de los paneles. Pero son una opción más “estética”, si es eso lo que buscabas.

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