El lunes frente a la costa de la Isla de Sulawesi en Indonesia, un grupo de pescadores encontraron una ballena muerta con varios kilos de plásticos en el estómago, según lo informó Laode Ahyar, director del parque nacional.
“La basura en el estómago estaba compuesta, entre otras cosas, por botellas de plástico, cuerdas de plástico, madera y un par de sandalias de goma”, detalló el director.
En el estómago del animal se encontraron una inmensa cantidad de residuos que parece inhumano e invita a que reflexionemos acerca del daño que le estamos provocando a nuestra naturaleza, que a veces pareciera que no la estamos cuidando lo suficiente.
Se encontraron 115 vasos de plástico, 25 bolsas del mismo material, dos zapatos, un saco de nylon y más de 1.000 residuos del mismo material.
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Los rescatistas del parque nacional de Wakatobi encontraron podrido el cadáver de la ballena que media 9,5 metros.
“Aunque no hemos podido deducir la causa de la muerte, los hechos que vemos son realmente horribles”, dijo Dwi Suprapti, coordinadora de conservación de especies marinas en WWF Indonesia.
La especialista sostuvo que no es posible asegurar que el plástico haya sido el causante de la muerte del animal, ya que el estado de descomposición era tan grande que fue imposible determinarlo.
Indonesia, China y Filipinas son los países con mayor nivel de contaminación en los océanos producto de los residuos plásticos. Sin embargo, el país asiático se comprometió a reducir la basura en las aguas para el 2025.
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A nivel global, se calcula que cada segundo se tiran 200 kilos de plástico al océano, que hoy está saturado con residuos de todos los tamaños desde el Artico a la Antártida.
El problema global por el que estamos atravesando está más que claro y nos afecta a todos. El plástico es de los más contaminantes ya que no se disuelve en el agua y llega al mar luego de ser arrastrado por ríos y el viento. Esto quiere decir que más tarde o más temprano, todo lo que se encuentra en el piso, termina, antes o después, en el agua.
Luego, el movimiento de las olas y el sol hace que se fraccionen los grandes objetos en micro y nano partículas, y los vuelve todavía más peligroso. Es así como ingresan a los tejidos de los animales.
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La decisión está en nosotros. ¿Cuánto tiempo más vamos a esperar para cuidar nuestra naturaleza?
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