¿Cansado de las cenas familiares, los villancicos y la felicidad de estas fechas? Sentís que la ingesta de polvorones ha alcanzado su máximo, y la glucosa de tu sangre empieza a atascarse. Hay dos motivos: el primero de ellos es por la comida y el segundo es por el cine cursi y feliz que nos vemos obligados a ver en estos días, y la gran cantidad de contenido que algunos consideran “meloso” que nos acosa por cada esquina.
Te recomendamos algunas opciones para que, cuando estés a punto de perder la cabeza, te relajes y veas estas fiestas con otros ojos. Con los de todos aquellos que te acompañan en el sentimiento de no disfrutar esta época.
La mejor opción para los que odian a Papá Noel, inmortalizado por Billy Bob Thornton en su versión más desagradable, ligeramente borracho y con tendencia a robar centros comerciales.
Para nada una versión melosa y dulce del Papá Noel que estamos acostumbrados a ver en la industria hollywoodense.
No podía faltar. El popular y conocido personaje antinavideño por excelencia. Una criatura muy verde, y que tiene como único objetivo destruir y odiar todo lo que tenga que ver con la Navidad. Hay que decir que su duro corazoncito termina reblandeciéndose, pero antes habremos disfrutado de un intenso espíritu anti Navidad.
Complicada elección, por ser defensora y retractora de la Navidad al mismo tiempo. Esta película es catalogada dentro del género cinematográfico del terror, en ella los Gremlins personifican una pura crítica a la sociedad del momento.
Alex de la Iglesia nunca falla. La historia de un cura que quiere encontrar al Anticristo, que va a nacer el 25 de diciembre, con la ayuda de un heavy, todo bajo el ritmo de una canción titulada “Feliz Falsedad”. Perfecto para todos los que deseen ver algo realista y pesimista sobre la Navidad.
Los habitantes de Nueva York se sienten tan asqueados por la misma existencia, que la energía negativa se acumula en forma de ectoplasma. Todo con intenciones destructivas, por supuesto. Los cazafantasmas salvarán el mundo de nuevo, pero veremos mucho caos antes.
Quedar atrapado en un hotel en el que tu padre se vuelve loco y quiere matarte, y tus únicas amigas son unas niñas muertas es lo que todo el mundo desea para unas fiestas agradables y cálidas. Al menos para Roman Polansky.
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