Es indudable que la velocidad de propagación del coronavirus y las condiciones con las cuáles se puede y debe vivir dentro de cada país ha cambiado la forma de convivencia de todos nosotros. Pero esto no queda restringido a lo que ocurre dentro de las fronteras de un país, sino que también ha dado lugar a la formación de nuevas “sociedades internacionales”, una de estas nuevas modalidades de conexión.
El impacto planetario de la pandemia rediseña las uniones y los posibles tratados internacionales
Justamente una de las sociedades internacionales más codiciadas en esta pandemia es la que han formado entre si los gobiernos de los países que lograron frenar la curva de contagios, aplanarla y tenerla controlada.
Para organizar este grupo muy selecto, Benjamin Netanyahu, el primer ministro de Israel, se conectó por video con los primeros ministros de Austria, Australia, Nueva Zelanda, Grecia, la República Checa, Dinamarca (los fundadores, a los que Noruega y Singapur se están uniendo).
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Una conferencia por invitación organizada por el austriaco Sebastian Kurz para discutir la nueva alianza de los casi inmunizados: reapertura de vuelos e intercambios comerciales o turísticos, intercambio de medidas de salud y tecnologías para rastrear a los infectados, como el utilizado por el Shin Bet, el servicio secreto interno israelí que generalmente se compromete a combatir el terrorismo palestino.
Los periódicos israelíes lo llaman un grupo “exclusivo”. Mientras que las otras naciones por ahora permanecen un poco más silenciosas al respecto. De todos modos ya hay experiencias previas en este sentido. Una vez el G7 de los grandes funcionó mientras el resto del mundo luchaba. En este caso, el pacto une las economías que están empezando a repuntar como la de Grecia con los “grandes” campeones del Producto Interno Bruto.
Aprovecharán ser atracciones turísticas y estar listo para abrir fronteras (solo entre ellas). Un mercado común, desde el Mediterráneo Oriental hasta el Pacífico Sur, pasando por el norte de Europa
Lo que resta es que la Autoridad de Seguridad Cibernética de Israel debe desarrollar un archivo digital común entre los Siete, para compartir con la promesa de respetar la privacidad de los ciudadanos. De hecho, estas naciones terminarían estableciendo un área Schengen de Covid-19, para viajar gratis con una visa de inmunidad.
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