Más de 3 mil kilos de papas es lo que hoy compra, por mes, “El Palacio de la Papa Frita”, uno de los grandes clásicos porteños. Y lo más curioso es que la demanda de este famoso restaurante va en aumento: desde que la Legislatura porteña lo declaró Bar Notable de la Ciudad, impidiendo su desalojo y salvaguardando al ícono de la calle Corrientes, se multiplicaron los comensales que se acercan a sus mesas.
“No sólo viene más gente, sino que además desde que Carlitos Balá nos eligió para celebrar sus 90 años, se duplicó el despacho de su plato favorito, el que pidió acá en su festejo: el Bife de Chorizo con Papas Soufflé,” comentó el empresario gastronómico argentino Ricardo Maidana, que adquirió la emblemática cadena de restaurantes.
“El Palacio de la Papa Frita” tiene más de 50 años de trayectoria, y fue pionero en la elaboración de las exquisitas papas soufflé. Ofrece a sus clientes una amplia cocina tradicional argentina caracterizada por una amplia variedad de platos y sabores: carnes, aves, frutos de mar y pastas caseras, elaborados con productos de primera calidad.
El “Espíritu” del Palacio tiene en su mística, la virtud de transmitir a cada momento la magia de los sentidos del placer, esos que auguran los mejores momentos.
Clientes como Don Finigard, de 104 años de edad que, fiel e identificado, concurre a su mesa desde hace 50 años
Si visitás Buenos Aires, no te pierdas una parada en algunas de las sedes del Palacio de la Papa Frita. Podés consultar direcciones en su página web.
El secreto de las papas más famosas
¿Cómo se hacen esas papas tan ricas y famosas? Es necesario pelar las papas, cortarlas por la mitad, emparejar sus 4 caras, cortar láminas de 4 mm de espesor y conservarlas en agua unas 12 horas para que el almidón se desprenda, forme película y brinde elasticidad.
Para freírlas, hay que utilizar un recipiente de aceite a 110 grados, por 5 minutos, hasta un tenue dorado. A continuación, usar un segundo recipiente a 220 grados, lo que dará el inflado y dorado final.
Muchos piden el plato favorito de Carlitos Balá: el Bife de Chorizo con Papas Soufflé
